El euro frena su escalada alcista y pierde los 1,18 dólares
El Banco Central Europeo no ha dado ninguna señal de que subirá los tipos de interés para aflojar la tendencia alcista de la moneda europea
La moneda única ha perdido la cota de los 1,18 dólares, a pesar de la tendencia alcista que ha mantenido durante la mayor parte del día debido a la incertidumbre política creada en Oriente Próximo tras los atentados terroristas de Turquía e Irak. Otras de las causas que han contribuido a la escalada alcista del euro han sido las claras perspectivas de recuperación de los países integrantes de la zona euro y los decepcionantes económicos en EEUU.
Las amenazas contra Japón del grupo terrorista internacional Al Qaeda y los dos ataques suicidas perpetrados el sábado contra dos sinagogas en Estambul han mantenido al euro por encima de los 1,18 dólares durante prácticamente toda la jornada. Sin embargo, a las 17.00 (hora española) la recogida de beneficios le ha llevado a perder terreno, y se cotizaba en el mercado de Francfort a 1,1789 dólares. Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE) ha fijado el cambio oficial del euro en 1,1803 dólares.
Según los expertos, para los próximos días, la situación en los mercados de divisas puede distenderse ligeramente, si no se producen nuevos atentados. La sensibilidad que muestran los mercados financieros respecto del terrorismo ha quedado hoy patente en Japón, donde las amenazas, supuestas o reales, de un ataque de Al Qaeda han lastrado al índice bursátil Nikkei un 3,7%.
El debilitamiento registrado hoy por el yen ha sido atribuido también al desplome de dicho barómetro y a las amenazas de la red de Bil Laden de cometer atentados en EEUU y sus aliados, incluido Japón. En Europa, el euro se siente arropado por un crecimiento económico modesto en la eurozona, en torno al 0,5% para el conjunto de 2003, que se consolidará el año siguiente, hasta el 1,7%, según previsiones del Banco Central Europeo (BCE).
Pero son los indicadores de confianza en Europa los que han dado alas al euro, más que el crecimiento real, que sigue siendo más reducido que en Japón y EEUU. Además, el abultado doble déficit -fiscal y por cuenta corriente-, en EEUU puede asestar en cualquier momento un duro golpe al billete verde y ha sido un elemento de presión constante sobre esta divisa en los meses pasados. No obstante, los expertos descartan que se repita un desplome del dólar, como el ocurrido en 1995 con el yen japonés, porque ahora varios bancos centrales asiáticos acudirían a salvar la divisa norteamericana, con la que tienen anclada sus monedas nacionales, aseguran los analistas.
Otro factor perjudicial para el dólar pueden haber sido los comentarios de funcionarios de la Reserva Federal estadounidense que aludían a que EEUU no modificará por algún tiempo los tipos de interés, actualmente en el mínimo histórico del 1%, debido a la baja inflación y al exceso de capacidad que hacen innecesario por ahora elevar las tasas. Tampoco el BCE ha dado ninguna señal en ese sentido, con los tipos desde junio en el 2%, el nivel más bajo en más de 50 años en los países que conforman hoy el área euro.
A este respecto, el Bundesbank ha advertido hoy de la posibilidad de que el Banco Central Europeo (BCE) eleve los tipos de interés ante los riesgos inflacionistas que presentan los déficits excesivos en la eurozona. Sin embargo, esta entidad hace alusión, principalmente, a la situación de Alemania y Francia y advierte del peligro que supone un déficit público elevado si no se compensa con otras medidas. En este sentido, se ha referido a la decisión del Gobierno del canciller alemán, Gerhard Schroeder, que prevé adelantar al 2004 su tercer tramo de recorte fiscal. Actualmente este proyecto se encuentra bloqueado en el Bundestag por la oposición conservadora.
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