Las tres plantas españolas de Alcatel podrían salvarse de los planes de reestructuración

El presidente de Alcatel, Serge Tchuruk, se ha reunido esta mañana con el comité de empresa, al que ha explicado que el plan de reestructuración del grupo francés de equipos de telecomunicaciones afectará a 13.500 trabajadores en todo el mundo.

Aunque Tchuruk no ha descartado la venta de "otras plantas industriales, aparte de las de componentes y baterías", ha asegurado que su número "según lo podemos apreciar hoy, sería muy limitado", y esa operación no se haría este año.

Tchuruk ha señalado que pretende la creación de filiales con 41 fábricas con "actividades rentables" en las que trabajan 8.000 personas, para buscar luego compradores, ya que "en algunos casos su pertenencia a Alcatel constituye un freno a su desarrollo".

Ha recordado que esa política se aplicó a su filial Nexans, en la que trabajan 6.000 personas en Europa, cuya "nueva libertad parece muy prometedora" y que es objeto de negociaciones para su venta.

De las 50 plantas afectadas, 27 están en Europa y 23 en Estados unidos.

Las 9 plantas de Saft (en las que trabajan 5.500 empleados), que ya estuvieron a punto de ser vendidas, serán cedidas, a condición de que "estemos seguros" de las condiciones sociales "en el plano humano y del empleo".

Ha asegurado que la cesión de las plantas a "socios responsables" como los que ha escogido -Flextronics, Laval o Sanmina- permitirá que diversifiquen su oferta "más allá del sector de las telecomunicaciones" en que está Alcatel, lo que constituye una mayor garantía de futuro.

Ha afirmado que Alcatel no venderá las plantas de tecnologías ópticas o espaciales o de "cualquier campo en el que quiera conservar integralmente el control estratégico", así como las de integración para "controlar la introducción de nuevos productos".

Oposición de los sindicatos

Los representantes sindicales del comité de empresa europeo de Alcatel han dado portazo a la reunión, en protesta por el plan de reestructuración de Tchuruk.

El representante del sindicato CFE-CGC, René Brault, ha explicado que los 30 representantes sindicales europeos han "votado para pedir la interrupción de la reunión para protestar contra el proyecto dereestructuración", y que sólo uno votó contra la propuesta.

El representante de la CGT, Dominique Campa, ha asegurado que decidieron salir del encuentro para "permitir que los sindicatos se vean y definan las modalidades de acciones a nivel europeo".

Los sindicatos han denunciado "la falta de precisión del proyecto de Serge Tchuruk", por lo que no se puede "hablar de negociaciones a estas alturas".

El presidente de Alcatel ha justificado ante los representantes sindicales europeos que el anuncio de la reestructuración lo hiciera el pasado miércoles en una entrevista a The Wall Street Journal antes de comunicárselo hoy a ellos directamente por "el contexto económico y social, en particular en la industria de las telecomunicaciones".