El PIB crece un 3,4% en su tercer trimestre consecutivo de desaceleración

Se trata del tercer trimestre de desaceleración de la economía española, que en este caso ha sido achacado por el INE a la menor aportación de la demanda interna, pues su contribución al PIB se redujo del 3% al 2,7% debido a un menor incremento tanto del gasto en consumo final como de la inversión.

La inversión aumentó el 3,2% y contribuyó al PIB con 0,8 puntos, mientras que el gasto en consumo final creció el 2,4%, y realizó una aportación de 1,8 puntos.

La demanda externa estabilizó su aportación en 0,6%, de forma que no ha compensado el menor impulso del componente interno como venía sucediendo en trimestres anteriores, según ha explicado el INE.

"Disciplina presupuestaria

Esta cifras son muy "positiva" comparada con el resto de la UE, según Rato

La creación de empleo ha sido tres décimas menor que en el pasado trimestre

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, ha declarado que estos datos "indican que nuestra economía ha tenido un crecimiento más equilibrado" por la "positiva" contribución del sector exterior.

"Estas cifras garantizarían un crecimiento más sostenido en el tiempo y que se compara muy positivamente con lo que ocurre en otros países europeos", ha declarado Rato.

Tras recordar que el marco en el que se mueve la economía española en Europa es de desaceleración, el ministro de Economía ha indicado como "la mejor estrategia para sortear esta situación" el "mantener una clara disciplina presupuestaria".

Sector exterior

En cuanto al sector exterior, destaca la desaceleración de las exportaciones, que aumentaron el 10,7%, frente al 11% del cuarto trimestre del año pasado, lo que obedeció esencialmente al perfil descendente de su componente de bienes, que subió el 9,6%.

Las importaciones registraron un crecimiento del 8%, dos décimas menos que en el trimestre previo.

Desde el punto de vista de la producción, también se refleja un menor ritmo de crecimiento y, así, la rama energética fue la que presentó la desaceleración más intensa, pues aumentó el 6,9%, desde el 10,1% anterior.

A continuación se situaron las ramas agraria y pesquera que, tras la moderada aceleración del trimestre anterior, redujeron siete décimas su ritmo de crecimiento, hasta el 1,7% interanual.

La industria, con una tasa de aumento del 2,5%, la construcción, del 5,7%, y los servicios, del 3,4%, mantuvieron la pauta de ralentización de los últimos trimestres.

Menor crecimiento del empleo

En cuanto al empleo, el número de puestos de trabajo a tiempo completo mantuvo el perfil desacelerado por tercer trimestre consecutivo, de modo que alcanzó un crecimiento del 2,7%, tres décimas menos que en el último trimestre del 2000.

Lo mismo sucedió con el empleo asalariado, cuyo descenso fue de cuatro décimas, con lo que la tasa de aumento se situó en el 3,1%.