Muchas faltas en el Calderón

Mathieu, el lateral izquierdo del Valencia, tuvo que ser atendido en la primera parte por un corte en una ceja, del que el duro defensa se recuperó pronto. El golpe que se llevó podría pasar por un buen ejemplo del partido. El juego del Atlético se desviaba siempre hacia su banda derecha, la de Juanfran y Adrián, de la que se encargaba Mathieu.

Los valencianistas, no muy diestros anoche en el pase, perdían el balón una vez tras otra y durante los primeros minutos del partido se dedicaron a cortar las arrancadas del Atlético una y otra vez con faltas (21 en total). Los rojiblancos acabaron entrando en ese juego (25), lo que acabó parando a un equipo en el que ha vuelto a creer su afición.

El recuerdo del conjunto que consiguió el doblete impregna el estadio Vicente Calderón. No solo por la pancarta que exhibe el Frente Atlético refiriéndose al espíritu del 96, más vivo que nunca ahora que Diego Pablo Simeone ronda, más que se sienta, el banquillo.

El técnico argentino ha vuelto a hacer creer en el Atlético, en que puede volver a estar arriba de la tabla, incluso aunque su equipo, a pesar de dominar los encuentros, no sea capaz de acertar con la portería. La afición, que ha podido ver a Futre en el Frente Atlético cantando y pitando cada pérdida de tiempo de Alves como uno más, apoya a este Atlético renovado, veloz y luchador, aunque demasiado manso ayer en el área de un Valencia del que no se supo mucho.