El Fórum Feminista emplaza a Emakunde a pronunciarse sobre la ley de violencia machista

Un manifiesto que ultima el Fórum Feminista María de Maeztu emplazará al Gobierno a paralizar la elaboración del anteproyecto de la ley de Violencia de Género, contra la que ya presentaron alegaciones tanto los técnicos de Igualdad del propio Ejecutivo como diversas organizaciones del movimiento feminista.

El documento, que abunda en las críticas tanto internas como externas al Ejecutivo que ya hizo públicas este periódico, realiza también un emplazamiento expreso a la directora de Emakunde, María Silvestre. "Exigimos a las instituciones públicas y al máximo organismo de Igualdad en la comunidad autónoma, Emakunde, un pronunciamiento público claro y contundente en relación al actual anteproyecto", subraya el manifiesto, que se someterá a la consideración de otras organizaciones del movimiento asociativo.

El colectivo pide una respuesta "rotunda" y paralizar el proyecto

El Departamento de Interior, responsable de la redacción del proyecto, no alberga ninguna intención de renunciar a una norma vasca sobre la violencia de género y no hablará sobre la cuestión en tanto no haya un borrador definitivo, señalaron ayer fuentes oficiales.

La portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, admitió hace dos semanas, a raíz de la información de EL PAÍS, la existencia de diferencias en torno al contenido de la ley en proceso de elaboración. La directora de Emakunde, María Silvestre, eludió pronunciarse sobre una norma que supuestamente sustraería competencias a ese organismo, aunque implícitamente admitió también las diferencias, al indicar que el proyecto se encontraba en plena fase de acercamiento de posturas.

El Fórum Feminista María de Maeztu rechaza que "el compromiso con la igualdad" se quede tanto en "meras declaraciones vacías" como en "clamoroso silencio, como está siendo el caso", acusa, en lo que parece una censura al organismo bajo responsabilidad de Silvestre, que depende a su vez directamente de Lehendakaritza.

Quienes ocupan cargos públicos en materia de igualdad tendrían la obligación de expresar públicamente su posición, estima este colectivo, que agrupa a mujeres de distintas sensibilidades políticas. El manifiesto exige "una respuesta rotunda" a un proyecto que, a su juicio, "no supone ningún avance en la erradicación de la violencia machista, sino un retroceso".