El astillero de Puerto Real se queda el martes sin trabajo

La factoría de Navantia Puerto Real (Cádiz) se quedarán sin nada en lo que trabajar el próximo martes. "Los talleres cerrarán", desvelaron ayer los sindicatos. Sus 640 trabajadores seguirán acudiendo a su puesto de trabajo pero no tendrán ningún barco que construir. A su negativo presente se suma su incierto futuro. "Aunque hoy mismo se firmara un nuevo contrato, esos talleres no verían la primera plancha hasta como mínimo nueve meses. Y la industria auxiliar algunos meses más", alertó el presidente del comité, Ramón Linares. La situación de los otros dos astilleros en Cádiz, el de San Fernando y el de la capital gaditana, presentan una situación algo mejor, pero no mucho más halagüeña.

Los comités de los tres astilleros en la bahía de Cádiz anunciaron ayer un calendario de movilizaciones que comenzará mañana domingo con el encierro en sus plantas de los trabajadores del astillero de Cádiz y San Fernando. El lunes, coincidiendo con la visita del ministro de Defensa, Pedro Morenés, para la entrega en la base de Rota de un barco construido en Navantia, se movilizarán los representantes sindicales. El martes los operarios de Puerto Real convocarán una asamblea que puede derivar en un nuevo corte del puente Carranza, uno de los dos únicos accesos a la capital gaditana.

Prevenir

Los sindicatos reconocieron ayer que, comparados con otros colectivos, su situación no es tan dramática. "De momento, cobramos". Pero sí creen necesario denunciar su caso, antes de agravarse aún más, porque se ven como paliadores de la crisis. "Si nosotros funcionamos, funciona la bahía de Cádiz. Nosotros podemos ser una solución pero tienen que darnos carga de trabajo".

Los sindicatos lamentaron ayer la falta de efectividad de las operaciones comerciales para aspirar a contratos de construcción de barcos civiles. "Lo único que venden es tecnología. No nos podemos quedar como una gestoría", reclamó el portavoz de los tres comités, José Antonio Oliva.

Puerto Real ha culminado ya los barcos encargados por Venezuela y los buques de acción marítima (BAM) encargados por el Ministerio de Defensa. La última fase de uno de esos buques y unas lanchas son la carga que tiene pendiente San Fernando. Culminará en pocos meses. Cádiz vive del cambiante sector de las reparaciones.