Cataluña se prepara para la nieve

Más vale prevenir que que miles de personas se queden sitiadas en sus coches en embotellamientos en las carreteras catalanas o en sus casas agotando todo tipo de combustible. Todos los responsables de los dispositivos de seguridad y emergencia de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona optaron ayer por extremar la cautela y activaron la alerta del plan de emergencia de nieve y hielo ante la amenaza de la ola de frío siberiano que se cierne sobre Cataluña.

Ayer por la noche, las predicciones meteorológicas mostraban grandes posibilidades de nevadas en las cotas de más de 200 metros y un descenso generalizado de las temperaturas, que se extenderá todo el fin de semana. En el interior de Cataluña las temperaturas podrían bajar de los -10 grados centígrados. En el litoral el mercurio podría descender hasta el cero y en Barcelona, nevar por la tarde.

Si las condiciones empeoran por la tarde se podrían suspender las clases

La nevada de marzo de 2010 y el fiasco que se vivió en buena parte de Cataluña y en Barcelona están todavía muy frescos en la memoria. El consejero de Interior, Felip Puig (CiU), explicó ayer que el episodio de estos días no se prevé tan fuerte, pero llamó a la preparación. Anoche 25 municipios habían activado sus planes de emergencia.

En Barcelona, los servicios de Medio Ambiente habían repartido 25 toneladas de sal en la parte alta de la ciudad y tenía preparadas seis retroexcavadoras. El primer teniente de alcalde, Joaquim Forn, pidió a los ciudadanos que no usaran el coche privado hoy, para evitar posibles atascos. "La ciudad está preparada para hacer frente a las condiciones meteorológicas", aseguró.

Forn explicó que no se recomendó oficialmente el cierre de los institutos y escuelas públicas, pero algunas lo hicieron unilateralmente. Fue el caso del colegio público Els Xiprers, en la montaña de Collserola, en Vallvidrera, que ayer avisó a los padres de los niños de que hoy suspendían las clases. Hace dos años, la escuela quedó semiaislada por la nieve y ahora ha optado por la prudencia. Desde el Departamento de Enseñanza apuntaron que solo se les había comunicado la modificación del transporte escolar de una ruta en la provincia de Lleida. Sin embargo, Puig dejó la puerta abierta a que mañana los estudiantes salgan a media jornada si las condiciones empeoran.

Las posibilidades de heladas también alertaron a los floricultores del Maresme, aunque desde el Mercado de la Flor se aseguró que los cultivos de rosas para Sant Jordi y San Valentín no se verán afectados. Los productores, sin embargo, utilizarán sistemas de calefacción móvil para evitar daños en las plantas.

El panorama en algunas carreteras requería el uso de cadenas en los accesos a Baqueira y en el Pla de Beret y ayer se cerró la carretera BV-5119 en Fogars de Montclús (Vallès Oriental). El Servicio Catalán de Tráfico pedía que se extremaran las precauciones en la conducción. Mientras, todos los camiones quitanieves estaban preparados al tiempo que otros esparcían sal en algunas carreteras de acceso a la capital catalana. Por lo que pudiera pasar.