Visteon amenaza con despidos baratos si no cierra antes de fin de año
Una circular repartida entre los 396 empleados de la planta de la empresa de componentes de automoción Visteon en El Puerto de Santa María (Cádiz) pone fecha a las intenciones de cierre definitivo de esta fábrica. La compañía quiere clausurar su planta el 30 de diciembre. Si los trabajadores aceptan, les pagarán una indemnización mínima de 20.000 euros, a razón de 40 días por año trabajado. En caso contrario, presentará concurso de acreedores. "Las indemnizaciones serán más bajas en ese caso", advierte en la misiva. Los sindicatos han convocado una asamblea de trabajadores el viernes. El lunes votarán individualmente qué deciden.
Visteon se ha hecho aficionada a las cartas. Por este método comunicó en noviembre su decisión de dejar de pagar las nóminas a todos los trabajadores por no poder asumir estos pagos. A pesar de que la multinacional ha duplicado sus beneficios a escala mundial en el primer semestre del año, ha reservado una partida de 21 millones de euros para cerrar su sede en El Puerto. Presentó un Expediente de Regulación de Empleo que fue rechazado por la Junta, lo que le obligó a dar actividad a la plantilla, y anunció un preconcurso de acreedores. Desde entonces, envía misivas a sus operarios insistiendo en la precaria situación económica de la planta y en su decisión irrevocable de echar el cerrojo.
"No vamos a negociar"
La última carta llegaba ayer. "Ni la empresa ni la Junta de Andalucía han encontrado a nadie interesado en hacerse cargo de esta planta. Ya no vamos a negociar ninguna propuesta que deje abierta la planta, ni siquiera de modo temporal. Y esta postura no va a cambiar", asegura de forma rotunda la circular repartida a cada uno de los empleados. "Visteon ya no tiene fondos para pagar las nóminas y está negociando con los acreedores, que ya han empezado a negarse a proporcionar bienes o servicios".
"La única cuestión pendiente es cómo se va a cerrar desde el punto de vista jurídico". Todo el relato es un argumento para convencer a la plantilla de la necesidad de que acepten las indemnizaciones que ofrece para cerrar la fábrica el 30 de diciembre. Contempla abonar 40 días de sueldo por año de trabajo.
