Alberto de Mendoza, galán porteño del cine español
A los 88 años, aquejado de una insuficiencia pulmonar, ha fallecido en Madrid el actor argentino Alberto de Mendoza, que hizo en España buena parte de su carrera. Nacido en Buenos Aires, hijo de andaluz y vasca, quedó huérfano a los cinco años, por lo que fue traído a España para ser cuidado por su abuela; le retornaron a su ciudad natal tras la Guerra Civil, junto a otros refugiados. Había aprendido ya a buscarse la vida trabajando en lo que podía, y también a dejarse fascinar por las coristas de las zarzuelas y las imágenes del cine.
En Argentina continuó en su lucha por la vida: a cambio de un bocadillo de mortadela bailaba ritmos de moda en un cabaré. Su fama de seductor le acompañó toda la vida, aunque él aseguraba que fueron ellas las que siempre tomaron la iniciativa: "Son muy astutas, unas mentirosas maravillosas... Si te quieren, mueven montañas; si no te quieren, muérete. Cuando yo era joven, me usaban; parece que lo hacía bien...".
Su salto al teatro y al cine argentinos en pequeños papeles fue rápido. Acabó convirtiéndose pronto en compañero de reparto de grandes actrices de la época. En 1958 protagonizó El jefe, de Fernando Ayala, una de las películas clave en la historia del cine argentino. Poco después fue reclamado por José Tamayo para intervenir en Divinas palabras, inaugurando el teatro Bellas Artes de Madrid. En el cine español actuó con Sara Montiel en La reina del Chantecler; con Carmen Sevilla en El secreto de Mónica; con Concha Velasco en María y la otra... Recientemente intervino en Tapas, de Cruz y Corbacho.
Casado durante 57 años, padre de familia, con nietos y biznietos, De Mendoza agradecía al final de su vida la suerte que había tenido, a pesar incluso de las películas mediocres: "Las recuerdo con cierta ternura porque me permitieron pagar el colegio de mis hijos. Yo he hecho películas malas, pero dignamente. En esta profesión hay que tener dignidad siempre". Y él la tuvo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.