En libertad una detenida por la operación contra Resistencia Galega
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La joven detenida en Vigo el miércoles junto a otras dos personas en el marco de la operación antiterrorista de la Audiencia Nacional, ha sido puesta en libertad condicional tras pasar tres días en dependencias policiales. El juez de la Audiencia Nacional que instruye la causa, Eloy Velasco, tiene previsto interrogar hoy a los independentistas gallegos detenidos en Vigo y Santiago el miércoles en posesión de una olla exprés que contenía 5,8 kilos de explosivos que supuestamente iban a utilizar para atentar el Día de la Constitución. El magistrado tiene previsto imputarles indiciariamente los delitos de integración en organización terrorista, tenencia de artefactos explosivos y estragos en grado de tentativa, informa Europa Press.
Entre los detenidos que han pasado a disposición judicial se encuentra E.V., de 26 años y natural de Santiago. El joven fue arrestado en el peaje de la autovía Vigo-Santiago cuando trasladaba en el coche en el que viajaba tres artefactos explosivos de gran potencia y cerca de 5,8 kilogramos de peso.En Vigo fueron arrestadas otras tres personas, R. R., de 33 años; J. Rodríguez, de 26 años y natural de Trasmirás (Ourense), y la mujer puesta ayer en libertad condicional, que será igualmente llamada a declarar. Todos ellos están considerados presuntos autores de la colocación de diversos artefactos explosivos e incendiarios contra objetivos políticos, sociales y económicos en Galicia. También han sido trasladados a Madrid para pasar a disposición judicial dos jóvenes arrestados el sábado en Lugo vinculados a Resistencia Galega.
La operación fue desarrollada por la Comisaría General de Información, en colaboración con la Jefatura de Policía de Galicia, dentro del dispositivo especial para frenar posibles atentados con motivo de las elecciones generales y de la celebración del Día de la Constitución.
El ministro de Justicia en funciones, Francisco Caamaño, definió ayer a Resistencia Galega, en una entrevista en la cadena Ser, como "movimiento pequeño y coyuntural", y tildó de "irracional" la utilización de la violencia en la acción política.
