Raya a la barbacoa

"Nueva York asiático". Así denomina David Muñoz Singapur. El cocinero, que acaba de obtener la segunda estrella Michelin en su restaurante madrileño Diverxo, pasó dos semanas de vacaciones en la ciudad-Estado.

¿Viaja a Asia para inspirarse?

Viajo para disfrutar; con la cocina, también. Los Hawker Center son una pasada.

¿Qué son?

Unas carpas, con el acondicionamiento mínimo, que el Ayuntamiento ha montado para controlar a los vendedores callejeros. Se instalan los puestos de comida, cada uno en su estilo, con recetas chinas, malayas, vietnamitas...

¿Busca nuevos sabores?

Esos lugares me vuelven loco. Me pasaría el día allí probando platos. Recuerdo que me llamó mucho la atención la raya a la barbacoa.

¿Algún restaurante de categoría?

Estuve en Waku Ghin, del chef australojaponés Tetsuya Wakuda. Una experiencia inigualable por los sabores y el espacio: en la penúltima planta de un rascacielos, el complejo Marina Bay Sands.

¿También es un templo del juego?

Sí, pero yo iba de comparsa. Jugó Ángela, mi mujer, que se puso con el Black Jack. Yo le soplaba las cartas, pero ni por esas ganamos.

Parece todo un poco artificial...

Artificial, no; Singapur es así. Y si das un paseo por Orchard Road puedes ver las últimas tendencias en moda, comida o cultura. Importan mucho talento y quizá por eso todo tiene un aire al mismo tiempo novedoso y un poco de plástico.