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Resaca en silencio. El culmen del frenesí electoral dejó a su paso un clamoroso silencio en la mayoría de las cuentas de Twitter de políticos locales y nacionales. Mención especial merecen los ganadores, que pasaron de la sobreabundancia al mutismo justo en la semana en que la ciudadanía se hacía más preguntas en las redes. ¿Se irá Gallardón? ¿Qué planes tiene Rajoy para su debut como presidente del Gobierno? ¿Por qué no empieza a bajar ya la prima de riesgo? Al margen de las respuestas de carril más o menos acertadas de su equipo de community managers, todo lo que supimos del líder del PP por este canal, cuatro días después del 20-N, fue que estaba "trabajando intensamente en nuestro objetivo: crear empleo y luchar contra la crisis". La presidenta Aguirre tampoco se manifestó en toda la semana, quizá porque tenía tareas más importantes (y delicadas) que acometer. Gallardón, aún en su papel de alcalde, solo hizo un puñado de menciones a los presupuestos de la ciudad. Y ya.

Perder y cambiar. En la otra orilla, lo más significativo fue que, la misma noche del 20-N, el candidato Rubalcaba cambió la denominación de su cuenta electoral (@conrubalcaba) para adaptarla a los nuevos e inciertos tiempos (@_Rubalcaba_), una transformación más cuidada que la que acometió el líder socialista madrileño, Tomás Gómez, tras su derrota en las elecciones autonómicas de mayo. Desde entonces, la abandonada cuenta @contigotomas ha sido sustituida por los entrecomillados del jefe que casi de forma exclusiva distribuye el usuario oficial del PSM (@psmadrid). El exministro no lo tiene tan fácil con la cuenta del PSOE, al menos mientras no se aclare quién manda ahora en el partido.

Caído dos veces. La semana de gloria del PP se tornó el miércoles súbitamente amarga para Francisco Granados, hasta entonces secretario general del partido en Madrid. La presidenta, que tras las elecciones de mayo lo sacó del Gobierno regional, terminó de retirarle la confianza con una destitución inesperada que inmediatamente mutó en comidilla de Twitter hasta hacer del asunto trending topic. Hubo quien, como @Dajifer, aprovechó la pujanza de la etiqueta #refraneroPPopular para ilustrar el episodio: "La Esperanza es la última que te muerde (que le pregunten a Granados)".

Preguntas al aire. Pero la frase para reflexionar nos la dejó el consejero de Economía Percival Manglano, que el viernes tuiteó: "¿Alguien alguna vez ha estado en un cóctel en el que los refrescos que pasan en las bandejas no estuviesen aguados?". Ahí es nada.

@GUIOMARDELSER