Ocho acuerdos en Bizkaia

Populares y peneuvistas mostaron ayer su acercamiento en materia económica cerrando y presentando públicamente el primer acuerdo presupuestario que alcanzan en Bizkaia. El pacto, en virtud del cual el PP se abstendrá en la votación en las cuentas de 2012, dándoles de esta forma vía libre, incluye un total de ocho puntos. El pacto supera el marco estrcito de las partidas presupuestarias al incluir el compromiso de las tres partes firmantes -la Diputación y los grupos junteros del PNV y el PP- de flexibilizar la aplicación de la normativa sobre las deudas y aplazamientos tributarios.

Entre los acuerdos que incluye el pacto figura el compromiso de la Diputación de rebajar entre un 30% y un 50% el peaje de los túneles de Artxanda hasta dejarlo en un euro para todos los vehículos y a todas horas, salvo de noche y los fines de semana, en que se mantienen las actuales tarifas.

La institución foral pagará durante año y medio la mitad de la Seguridad Social que deban abonar los emprendedores autónomos menores de 35 años. Otros puntos de relieve son la creación de un fondo dotado con 300.000 euros para reactivar el comercio o sendos programas de respiro para familais y cuidadoress de mayores, dependientes y discapacitados intelectuales, tanto en residencias como en domicilios, dotados en total con 600.000 euros.

El acuerdo fue presentado por sus cuatro firmantes: los portavoces del PNV y el PP en las Juntas de Bizkaia, Unai Rementería y Esther Martínez, respectivamente, y los diputados de Presidencia, Juan María Aburto, y Hacienda, Juan María Iruarrizaga.

"Este acuerdo no es un fin y puede ser el comienzo de un nuevo tiempo", resaltó Martínez, quien ha llevado personalmente las negociaciones por su partido. Rementeria recalcó que se trata de un acuerdo "exclusivamente presupuestario y de ámbito foral" y "no va más allá". El texto firmado limita su ámbito material al proyecto presupuestario para 2012.

El PP fue el único grupo que aceptó avanzar en la negociación de las cuentas con el PNV, mientras socialistas y Bildu rechazaban esa posibilidad. Los populares dejaron claro desde el principio que su compromiso llegaría solo hasta la abstención cuando se vote el proyecto.