Atlas de cultura inmaterial
'Casa y familia' añade el séptimo volumen al proyecto etnográfico que inició Barandiaran - 90 investigadores han trabajado en la obra
El testimonio de 750 personas, habitantes de cerca de 90 localidades del País Vasco, Navarra y parte del departamento francés de Pirineos Atlánticos, ha sido la materia prima que ha permitido elaborar Casa y familia en Vasconia, el séptimo volumen del Atlas Etnográfico de Euskal Herria.
El antropólogo, arqueólogo y etnografo José Miguel de Barandiarán (Ataun, 1889- 1991) puso en marcha el proyecto del atlas, su propuesta más ambiciosa, hace 80 años. Desde su desaparición sus discípulos, organizados en los grupos Etniker Euskalherria que dirige Ander Manterola, han continuado las investigaciones. "Es la cultura que se va, la cultura inmaterial", resumió ayer Manterola en la presentación de la obra, un libro de más de mil páginas.
El trabajo de campo recogió el testimonio de un total de 750 personas
El estudio se centra en las viviendas rurales tradicionales
En Casa y familia en Vasconia han trabajado 90 investigadores que realizaron el trabajo de campo en 87 localidades. Su instrumento de trabajo fue el cuestionario que formuló Barandiarán en 1974 para acercarse a las manifestaciones tradicionales de los grupos humanos de Vasconia tal y como llegaron al siglo XX y todavía se recuerda en el XXI.
La casa rural tradicional, junto al mobiliario y los enseres que se utilizaban en la vida doméstica, fue el centro de atención de la investigación, pero sin obviar las villas de los núcleos urbanos o las peculiaridades de las viviendas de pescadores. Sus autores precisan que se trata de "un estudio etnográfico y no arquitectónico", aunque también atienda a las características de las construcciones. El libro habla de detalles como el tipo de tejados, el sistema de alumbrado o el ajuar, pero también de los ritos que se desarrollaban en torno al fuego o las creencias sobre los símbolos protectores de la casa.
La obra habla también de la organización familiar, las relaciones de parentesco, la transmisión del patrimonio y hasta la forma de defender el honor del grupo.
El gran proyecto de Barandiaran para registrar sistemáticamente los hechos culturales que configuran la vida tradicional de Euskal Herria requiere tiempo. La alimentación doméstica (1990) fue el primer estudio publicado. Después llegaron Juegos infantiles (1993), Ritos funerarios (1995), Ritos del nacimiento al matrimonio (1998), Ganadería y pastoreo (2000) y Medicina popular (2004).
El próximo 21 de diciembre - el dia del solsticio de invierno, recordó Manterola- se cumplirán 20 años del fallecimiento de Barandiarán. Los investigadores que han participado en la elaboración del último volumen del Atlas Etnográfico han dedicado su trabajo "al gran maestro". La labor de los grupos Etniker continúa ahora con la investigación referente a la agricultura, dentro de un proyecto que prevé elaborar 16 volúmenes.
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