El PP recicla la idea socialista del mes de permiso de paternidad
Los populares buscan hacerse un hueco en el discurso social
Cuando haya dinero, los permisos de paternidad durarán cuatro semanas. Esta fue la promesa electoral que ayer presentó Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del Partido Popular catalán, durante un acto de campaña en un local de ocio infantil en Barcelona. Se trata de una prestación que el Gobierno socialista ya había aprobado y que, por culpa de la crisis económica, no entró en vigor el pasado enero.
Sánchez-Camacho relevó en campaña al cabeza de lista del partido en Barcelona, Jorge Fernández Díaz, que sufre de faringitis como se pudo apreciar durante el debate entre candidatos en TV-3. La presidenta estuvo acompañada del número dos de la lista, Jorge Moragas, que hasta ahora no había hecho campaña en Cataluña.
El 'número dos' por Barcelona había estado ausente de la campaña
La propuesta de ampliación forma parte del Plan Nacional de la Familia, que incluye también un plan para mejorar la conciliación de la vida familiar y laboral. Así, el permiso para los padres pasaría de 15 días (dos por por nacimiento y 13 de permiso) a cuatro semanas. Sánchez-Camacho, sin embargo, aclaró que esto será posible cuando la situación económica lo permita. "Cuando empiece la recuperación económica, para el PP será una prioridad ampliar con carácter obligatorio el permiso de paternidad", dijo.
El argumento económico es el mismo que el Gobierno socialista esgrimió en los Presupuesto Generales de 2010 para postergar un año la decisión de ampliar el permiso, que debería comenzar el próximo enero. El recorte permitió al Ejecutivo ahorrar 200 millones de euros. La propuesta de prestación fue utilizada en la campaña de José Luis Rodríguez Zapatero en 2007. Hasta finales de octubre de ese año, se habían gestionado 202.734 permisos.
También ayer, en un mitin en Canovelles (Vallès Oriental), Sánchez-Camacho aprovechó para culpar a los socialistas de la baja natalidad en España porque "no apoyan suficiente a la familia". Además del tema de la crisis económica, el PP usa la protección a la familia como gran baza electoral. Al discurso del hogar tradicional y de ayudas a las mujeres embarazadas, por ejemplo, ahora suma propuestas de un corte más progresista
Moragas, por su parte, aprovechó para criticar al candidato de CiU, Josep Antoni Duran, a quien acusó de "improvisar" y "desorientar a su electorado" por apostar por políticas "soberanistas y hasta independistas" un día y al otro reivindicar el pacto del Majestic.
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