Un 'fontanero' de la información
"Lo mío siempre ha sido más la investigación que la innovación", solía presumir en sus correos el exdirigente del PNV alavés Aitor Tellería, un auténtico fontanero de la información al servicio del partido y única persona imputada en los dos escándalos que han sacudido los cimientos del Araba Buru Batzar presidido por Iñaki Gerenabarrena, la trama de presunta corrupción y la del supuesto espionaje político.
Amigo y conocido de varios ertzainas de la antigua Unidad de Información y Análisis dedicada a la lucha antiterrorista, ante el juez recalcó que la información encontrada en su domicilio le había llegado a través de "anónimos" que solían ser enviados al partido y que él era el encargado de filtrar. La ejecutiva del PNV alavés nunca llegó a aclarar quién tomó el relevo de Tellería al frente de esta tarea cuando dejó su puesto en la ejecutiva tras su detención en marzo de 2010.
Su vida profesional dependió en gran parte del PNV y los puestos en los que el partido le iba colocando, mientras su amigo Alfredo de Miguel aceleraba su ascenso a la más altas esferas como diputado foral, máximo responsable urbanístico de la provincia y vicepresidente de Caja Vital.
Cuando fue detenido, era el encargado del semillero de empresas del parque tecnológico de Miñano en Álava. Estuviera donde estuviera, Tellería siempre estaba pendiente -"Nere, esto puede interesar a los que se dedican a Industria. Se empieza a ver la impronta socialista", explicaba en un correo enviado a la parlamentaria peneuvista Nerea Antia con datos sobre el cierre de un programa de la SPRI que terminaría publicada en un periódico afín en 2009-.
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