Alarte apunta que "el único sondeo fiable" se dará el 20 de noviembre

Jorge Alarte, secretario general de los Socialistas Valencianos, expresó ayer su "máximo respeto por los sondeos de opinión que publican medios tan solventes como EL PAÍS", pero aseguró que su política pasa por no hacer nunca comentarios sobre encuestas de opinión. Un sondeo elaborado por Metroscopia y publicado el domingo por EL PAÍS, apunta que los socialistas apenas superarán el 30% de los votos emitidos en la Comunidad Valenciana en las elecciones generales del 20 de noviembre, el peor resultado de su historia, y que el PSPV-PSOE perderá tres de los 14 escaños que obtuvieron en 2008. "El único sondeo fiable es la votación del 20 de noviembre", sostiene Alarte.

Antonio Clemente, secretario general del PP de la Comunidad Valenciana, recordó cómo hace tres semanas presentó una encuesta que arroja "los mismos resultados" que la difundida por EL PAÍS. Clemente aseguró que los sondeos que baraja el partido atribuyen el último escaño por Alicante al PP, mientras que Metroscopia apunta que ese puesto está en disputa con Esquerra Unida, que podría lograr un diputado en esa provincia.

Morera considera un hito histórico lograr un diputado por Compromís

Sanz acoge con "prudente optimismo" los resultados de EU

El PP no mejora su intención de voto, pero la distancia con los socialistas crece hasta cerca de 20 puntos y permite al partido mayoritario ganar dos o tres escaños en la Comunidad Valenciana.

Enric Morera, portavoz de Compromís, aseguró que obtener un escaño por Valencia en el Congreso de los Diputados, tal como apunta el sondeo de Metroscopia, sería "un éxito histórico". Morera se mostró convencido que la coalición entre Bloc, Iniciativa del Poble Valencià, Els Verds y Equo logrará representación en Madrid. Y restó importancia a los augurios sobre la caída de votos que suelen registrar los nacionalistas en las elecciones de ámbito estatal. "El Bloc está detrás, pero ahora somos Compromís, una marca mucho más amplia", comentó Morera, "y si revalidamos los resultados de las elecciones autonómicas lograremos un diputado en Madrid".

Marga Sanz, coordinadora general de Esquerra Unida, expresó su "prudente optimismo" por los resultados de una encuesta que otorga un diputado a la formación de izquierdas en la provincia de Valencia y la posibilidad de obtener un segundo escaño en Alicante. "Nos alegran estas previsiones pero todavía queda mucho trabajo por hacer", declaró la coordinadora general de Esquerra Unida, consciente de que las encuestas suelen ofrecer mejores resultados a la formación de izquierdas que los recuentos electorales.

Los partidos en la oposición municipal en Alicante recibieron como un bálsamo el apartado de la encuesta de Metroscopia sobre el caso Brugal. Según el sondeo, un 58% de los valencianos, que tenían noticias sobre esta trama de corrupción, considera que la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, debe dimitir; y otro 42% cree que está "mucho o bastante implicada".

La portavoz del PSPV-PSOE, Elena Martín, destacó que la encuesta refleja sus denuncias. "Es lo mismo que estamos denunciado hace tiempo los socialistas, que la alcaldesa está implicada y que se debe ir". La concejal socialista exigió al PP, y en concreto a Alberto Fabra y al líder del PP Mariano Rajoy que "actúen y le hagan dimitir, sino serán cómplices de este escándalo". Según Martín, cada día que pasa es más evidente que "Castedo no tiene solución, pero Alicante sí, y se merece una alcaldesa que trabaje, de explicaciones públicas y no se dedique a enviar documentos a los medios de comunicación sobre el PGOU que no aportan nada".

El portavoz de Esquerra Unida, Miguel Ángel Pavón, aplaudió que la encuesta "rompa con la indiferencia social ante los casos de corrupción", y auguró que la implicación de Castedo en el caso Brugal "al final pasará factura electoral en algunos feudos del PP como es Alicante".

Por su lado, Fernando Llopis, concejal de UpD en el Ayuntamiento, prefirió "esperar a que los jueces dictaminen" el futuro judicial de la alcaldesa, pero lamentó que "el Gobierno municipal y la ciudad estén paralizados por culpa de este escándalo". Fuentes de la alcaldía evitaron valorar ayer los datos de la encuesta publicada por EL PAÍS.