Desaparece el festival de cine de animación de Córdoba

Animacor, el festival de cine de animación de Córdoba, no verá su séptima edición. Uno de los certámenes más singulares del panorama andaluz apaga el proyector por el recorte presupuestario. Otra cita audiovisual más que se tacha del calendario, como ha ocurrido con la Mostra de Valencia. Oficialmente, nadie le ha comunicado a Antonio Zurera la defunción, pero lo daba por hecho porque desde marzo no se ha celebrado ninguna reunión.

Animacor llevaba años en la cuerda floja. En su sexta edición ya vio reducido su presupuesto a 150.000 euros, la mitad que la media de los años anteriores. Zurera achaca la desaparición a la profunda crisis económica que ya estuvo a punto de llevarse por delante el festival en 2010. "Estoy seguro de que esto no tiene nada que ver con el cambio político que se ha vivido en la Diputación de Córdoba", señala. Animacor estaba principalmente financiado por la Diputación de Córdoba, con ayuda de la Junta y otras instituciones. Desde mayo, el gobierno provincial está en manos del Partido Popular. Fuentes del PP en la Diputación aseguran que el fin de Animacor se debe, sobre todo, a la suspensión de las ayudas de la Junta.

Por otro lado, las mismas fuentes aseguran que se está trabajando en un nuevo modelo de cita cinematográfica que siga con el espíritu del antiguo festival. Señalan que la diputada Rosario Alarcón ya está trabajando en esta línea.

Presupuesto limitado

Antonio Zurera, el director e ideólogo de Animacor, no está al corriente de estos cambios. Zurera hace un buen balance de la cita anual que puso a Córdoba en el mapa de los animadores. "Hemos traído a gente muy buena usando un presupuesto muy limitado", asevera recordando a personajes de la talla del director cubano Juan Padrón (autor de Vampiros en La Habana) o del director de la película de Los Simpson, David Silverman.

El que fuera director del certamen sigue agradeciendo el trabajo de la Diputación. "No puedo hablar mal de esta institución. Apostaron por el proyecto y se esforzaron en sacarlo adelante", prosigue. Animacor formaba parte de la oferta cultural de la candidatura de Córdoba para ser capital cultural de Europa en 2016. Finalmente Córdoba quedó fuera y San Sebastián salió elegida. Muchos pensaron entonces que aquello supondría la condena definitiva para el festival de animación. Y no se equivocaron.