Los indignados se topan con el gasto militar
Las mejoras sociales solo son posibles a costa del Ejército, según un informe
Los indignados israelíes volvieron a indignarse ayer, tras la lectura del informe que, supuestamente, debía recoger sus reivindicaciones. La comisión dirigida por el profesor Manuel Trajtenberg recomendó al Gobierno que aumentara el gasto social en 30.000 millones de shekels (unos 6.000 millones de euros) durante los próximos cinco años. El problema consistía en que ese dinero, según el informe de la comisión, debía recortarse de los gastos militares, cosa del todo imposible con el actual Gobierno y el actual Parlamento. "No quiero reírme del comité, aunque el comité se haya reído de nosotros", declaró Daphni Leef, líder del movimiento. "El verano ha terminado, pero nuestra lucha continúa", añadió. Leef y sus compañeros dieron al primer ministro, Benjamín Netanyahu, un mes de plazo para que adoptara medidas a favor de las clases medias y de los segmentos sociales más desprotegidos, como las madres solteras o personas sin residencia. "Si no hay novedades", anunció, "el 28 de octubre volveremos a manifestarnos de forma masiva".
Es impensable que el Gobierno reduzca el presupuesto de Defensa
El propio profesor Trajtenberg, cuyo informe se parecía más a una lista de buenos deseos que a un plan realista, admitió que no era fácil plantearse una reducción del presupuesto de Defensa "ante todas las amenazas que rodean" a Israel. Dado que los militares se opusieron de inmediato a cualquier recorte, y que Trajtenberg ni siquiera se planteaba la opción de un aumento del déficit presupuestario, el texto fue considerado irrelevante por el movimiento 14-J, que agrupa a los indignados, los estudiantes, los sindicatos y la mayoría de los partidos. Fue significativo que solo lo aplaudieran el primer ministro y el Banco de Israel.
"Se nos confió una tarea que se presentaba imposible, porque un comité no puede cambiar la sociedad", dijo Trajtenberg. Algunas de sus propuestas eran tan posibilistas que ya habían sido aprobadas como ley tiempo atrás. Es el caso de la escolarización pública a los tres años, en lugar de a los cinco, una medida en vigor, pero no aplicada por falta de presupuesto. La comisión de Trajtenberg también recomendó la construcción de 200.000 viviendas para alquiler, la creación de 60.000 nuevas plazas de guardería asequibles, la supresión de algunos aranceles, subvenciones para alimentos básicos y un aumento del 2% en el impuesto sobre la renta para quienes ingresan más de 100 millones de shekels anuales.
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