Valencia sube las tasas municipales un 3,2% para ajustarlas al coste de la vida

La comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer una subida del 3,2% de las tasas municipales en 2012 para acompasarlas al índice de precios al consumo. Los cinco impuestos municipales -IBI, IAE, Plusvalía, ICIO e Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica- seguirán congelados, dijo el concejal delegado de Hacienda, Silvestre Senent. La comisión aprobó el reconocimiento de nuevas facturas. En lo que va de año, el Gobierno local ha sacado facturas del cajón -oficialmente, reconocimiento extrajudicial de crédito- por un montante de 85 millones de euros. "Es inaceptable que en 2011 estemos pagando gastos de 2009 por un montante de 39 millones de euros", denunció el concejal socialista Pedro Sánchez.

Senent criticó la obsesión de la oposición por hablar de facturas en los cajones, porque "todas están en la Delegación de Hacienda y no en ningún cajón, y por eso se presentan para hacer un reconocimiento extrajudicial de crédito como el que esta mañana se ha aprobado". Según Senent, el pleno municipal aprueba cada tres meses una relación de facturas sin consignación presupuestaria para poderlas pagar.

Compromís votó en contra del aumento del IPC en las tasas municipales, por entender que la cifra del 3,2% "no responde a la realidad" del indicador del IPC, que será "mucho menor" por la crisis. Según su portavoz, Joan Ribó, la subida de impuestos y tasas municipales "no es el mejor camino para ayudar a las familias que están sufriendo los efectos imparables de la peor recesión económica que nunca hemos vivido".

La concejal de EU Rosa Albert denunció el uso que el equipo de gobierno del PP hace de los "reconocimientos extrajudiciales de crédito", que, a su juicio, se han convertido en "la tapadera perfecta para sacar a la luz facturas que no sabemos de dónde han salido". "¿Qué tiene de extraordinario o de gasto imprevisto una factura de la luz, de agua o de limpieza, entre otras?", se preguntó la edil.