Los profesores convierten a Aguirre en bruja de cuento

"Había una vez un profesor que trabajaba en unas condiciones leoninas por culpa de una bruja: Esperanza Aguirre". Con este atípico cuento unos 60 profesores terminaron ayer un acto de protesta en la plaza de España contra las instrucciones de la Consejería de Educación para este curso, que amplían el horario lectivo de los docentes de secundaria y han motivado la pérdida de 2.000 puestos de interino, según las estimaciones de sindicatos y asociaciones de padres.

Los profesores, vestidos con la camiseta verde que se ha convertido en el símbolo de su protesta, formaron una cadena humana en torno al monumento de Miguel de Cervantes pasadas las doce del mediodía. Los manifestantes mostraron pancartas de "No a los recortes" o "Más educación", y gritaron mensajes como "No a Esperanza, sí a la enseñanza". La cadena se convoca cada sábado, desde el pasado 10 de septiembre, a través de las redes sociales y al margen de las organizaciones sindicales. "Es una quedada de docentes que surge con el objetivo de informar, pero no es una medida de presión porque lo hacemos en nuestro tiempo libre y en espacios donde no molestamos a nadie", indicó ayer uno de los impulsores de la convocatoria.

Otra de las concentradas, profesora interina, afirmó que, después de cinco años como tutora de una clase, este año le han hecho un contrato de un mes. "Aunque la consejera [Lucía Figar] me incluya en sus cifras de contratados, mis condiciones son de una total precarización porque dentro de un mes volveré a estar en la calle". Los profesores celebrarán diversas asambleas la próxima semana para concretar más protestas ante el firme rechazo de la presidenta de la Comunidad a derogar las instrucciones.