Los toqueteos de Mila Kunis

Son un club en Hollywood. Emma Stone, Amanda Seyfried y Mila Kunis. Sus ojazos las delatan. Y sus curvas. Y sus películas, quizá. Con Kunis, ucrania, de 28 años, muchos se dan cabezazos por no haber tenido las agallas del sargento Scott Moore. El marine, vía YouTube y desde Afganistán, la invitó al baile de su regimiento el próximo 18 de noviembre. "Tómate un segundo, piénsalo y respóndeme", añadió en sus 19 segundos de fama. Y ella dijo: "Sí". "No fue una encerrona. Me siento honrada", dice en la presentación de Con derecho a roce, su último estreno junto a Justin Timberlake, la quinta mujer más sexi del planeta según la revista Maxim's y la friki más atractiva según Wired dada su afición por el juego World of Warcraft.

Hay muchas cosas que no sabemos de Kunis.

"No recuerdo cómo empecé, aunque mi familia dice que volvía todos los días llorando del cole y que en mi primera redacción, a los siete años, me imaginaba ciega y muda", rememora de esos primeros años recién llegada a EE UU desde los Cárpatos con su familia, 250 dólares y nada de inglés. Era diferente y quería ser como las demás. Hasta que quiso ser actriz. Con nueve años. "Eso me dio confianza", asegura. Su inseguridad es difícil de creer. Mintió sobre su edad para hacerse hueco en That '70s show (querían a alguien de 18 y ella tenía 14). Y protagonizó junto a su amiga Natalie Portman la escena lésbica del siglo en Cisne negro. "No tuvo nada de agradable", niega con la cabeza. Lo mismo le pasó con Justin Timberlake, con quien también protagoniza varias escenas de acción en la cama en Con derecho a roce. "Al menos, nos dieron la opción de rodar estas escenas al final de la producción, y eso lo hizo más fácil, pero sigo sin disfrutarlas", confirma.

Kunis exuda sexualidad. "He pillado el truco. Al principio no me gustaba ser el centro de atención, ahora lo disfruto. Pero estoy más cómoda cuando llego a casa y me pongo el pijama. No soy una puta de la moda".

Lo único que la deja muda es el nombre de Macaulay Culkin. Su relación de ocho años pasó desapercibida. Para desviar la conversación, habla de su vida de soltera en su nueva casa, que compró en enero. "Es agradable estar ahí, leyendo bajo una higuera... nada me hace más feliz", resume. Su carrera sigue adelante junto a Seth MacFarlane (el creador de Padre de familia, donde Kunis da voz a la nada sexi Meg Griffin) en la película Ted y a las órdenes de Sam Raimi como la bruja Teodora en la precuela Oz: The great and powerful. "Todos tenemos una bruja dentro, ¿no?".

Con derecho a roce se estrena el 23 de septiembre.