Windows 8 da los primeros pasos

Microsoft presentó ayer a los desarrolladores Windows 8, su nuevo sistema operativo, que no llegará todavía al mercado. No desveló todas sus novedades. De lo visto ayer, destaca que con el mismo sistema operativo el usuario dispone de dos interfaces según lo maneje en un móvil, una tableta o un ordenador de sobremesa, o según las tareas que se proponga realizar. De hecho, el escritorio es una aplicación que alberga otras aplicaciones.

El nuevo interfaz, Metro, se gobierna tanto con el dedo como con un bolígrafo digital, que hasta permite borrar; con el ratón o desde el teclado, así como con los gestos, incorporando la tecnología de Kinect. La rapidez con que la máquina responde a las órdenes es un dato inédito en las anteriores versiones de Windows.

Las invitaciones a Build, la conferencia de presentación que se celebra en Los Ángeles, ya mostraban la ambición del proyecto: "Windows 95 cambió el pecé. Build demostrará que Windows 8 lo cambia todo". Y la principal prueba de ello es que los iconos de siempre se sustituyen por una especie de baldosas, amoldables en su talla, y dinámicas en la información que suministran. Se actualizan y avisan desde la recepción de un correo electrónico hasta un nuevo contacto.

Este interfaz está pensado para una nueva generación de aplicaciones, más invasivas y que ocupan toda la pantalla. Es el llamado entorno Metro, en el que Windows 8 no parece Windows. Estas novedades no excluyen un uso tradicional, al que habrá que acudir para determinadas operaciones, para no romper los hábitos al propietario de un ordenador acostumbrado a dar las órdenes desde el ratón y el teclado. Los dos entornos, táctil y tradicional, cohabitan.

Las aplicaciones se ejecutan tanto sobre la arquitectura de los procesadores de Intel como los de ARM. Con pocos ajustes trabajan sobre distintos lenguajes, lo que facilita el trabajo de sus creadores, tanto para desarrollar en pecé, móvil o tableta. Durante la presentación, en la que crearon la aplicación PhotoDoodle escribiendo en tiempo real sus 58 líneas de código, se vieron detalles de la futura tienda de aplicaciones de Microsoft, donde los usuarios podrán probar durante siete días las aplicaciones antes de comprarlas.

Windows 8 es totalmente compatible con su antecesor. Todas las aplicaciones actuales continuarán funcionando en el nuevo sistema operativo, que también consume menos memoria. Microsoft ha vendido 450.000 copias en tres años. La compañía dice que 542 millones de usuarios se conectan mensualmente a los servicios Live.

Otro punto destacado de W8 es la seguridad, que permite rechazar automáticamente una aplicación sospechosa, en función de la base de datos "actualizada" por Microsoft y sus socios.

Windows 8 será, además, exportable. Una empresa puede suministrar a su empleado una llave USB con el sistema al completo, de tal manera que pueda proseguir sus tareas fuera del ordenador corporativo.

Las tabletas de Samsung, los pecés de HP y los ultraminiportátiles con corazón Intel completaron la primera demostración pública de Windows 8. Un sistema que arranca en solo ocho segundos.