Las heridas por pelotas de goma llevan a nueve 'mossos' ante el juez

Óscar Alpuente y Jordi Naval acudieron, en 2009, a celebrar la victoria del Barça en la Champions. No fue una celebración feliz. Acabaron con graves heridas en un ojo por las pelotas de goma lanzadas por los Mossos d'Esquadra. Las dos denuncias interpuestas por Alpuente y Naval han recorrido un tortuoso camino y ahora, más de dos años después, van a llevar a nueve agentes de la Brigada Móvil (antidisturbios) a declarar en los juzgados de instrucción como imputados.

Los dos procesos habían sido archivados, pero la Audiencia de Barcelona obligó a reabrirlos hace unos meses y exigió al juzgado que pidiera información al Departamento de Interior para aclarar qué agentes dispararon.

El caso de Naval, que perdió un ojo por el impacto de una bala de goma, implica a seis mossos: tres escopeteros, dos cabos y un subinspector de la Brigada Móvil, avanzó ayer El Periódico de Catalunya. La bala fue disparada en la calle de la Unió, cerca de La Rambla. Según la versión del joven, él y un amigo se vieron "sorprendidos" tras ver la final en el barrio del Raval. Es previsible, según fuentes judiciales, que la imputación se mantenga solo para el mosso que efectuó el disparo.

Alpuente fue alcanzado por la bola de goma en el paseo de Gràcia, tras quedar acorralado en medio de los disturbios que se sucedieron tras el triunfo azulgrana, siempre según su versión. El juzgado que investiga el caso interrogó a los tres agentes antidisturbios que se encontraban en el lugar de los hechos. En aquella ocasión declararon como testigos. Ahora, sin embargo, tendrán que hacerlo como imputados. Aunque, de nuevo, es probable que el presunto delito de lesiones por imprudencia se atribuya al agente que efectuó el disparo.