A la bancada socialista en la Cámara alta le salen disidentes

"Además de la prima de riesgo económica está la prima de riesgo política; y además de la confianza de los mercados está la de los ciudadanos". Así resume el senador socialista Imanol Zubero la razón por la que no apoyará hoy la reforma de la Constitución. Roberto Lertxundi, su compañero de filas en el PSE-EE, se abstendrá en la votación.

Zubero, doctor en Sociología y profesor titular en la Universidad del País Vasco, cree que no tiene sentido pensar que los mercados actúan con alguna racionalidad y que medidas como el artículo 135 propuesto moderan sus impulsos de "especulación feroz". "Es una economía de casino y la única posibilidad que tenemos es reglamentarla", apunta.

Lertxundi, ginecólogo, incide en que "no es una cuestión de disidencia ni de rebeldía", y en que no quiere "hacer más ruido". "Me abstengo porque no voto contra el Gobierno", explica brevemente por teléfono. Y lo hace, asegura, "para que el precedente de una modificación de la Constitución como esta no pase desapercibido".

El senador Zubero no niega que desde su posición -cuenta que está en política accidentalmente y no va a repetir- es más fácil disentir. Y señala que "las explicaciones de [Alfredo Pérez] Rubalcaba dan sentido a la decisión", que el candidato "está actuando con responsabilidad". No hubo presiones, y sí "mucha libertad y respeto" en la reunión del lunes 29 de septiembre en la que el candidato socialista trató de convencer a diputados y senadores sobre la necesidad de la reforma, asegura el sociólogo.

Zubero espera a la reunión de su grupo antes del pleno para decidir si se abstendrá, se ausentará o votará no. "Lo único que tengo claro es que no estoy de acuerdo y voy a seguir en esa convicción", asegura.