La patronal debate las reformas
El presidente de CEOE adelanta la junta directiva al martes para recabar el apoyo empresarial a las últimas medidas económicas y prepara reuniones con los sindicatos
El curso se presenta muy alterado por el adelanto electoral y la reforma de la Constitución, entre otros asuntos de mayor o menor importancia, y el presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, quiere tener toda la maquinaria en funcionamiento cuanto antes. Seguramente por ese motivo ha adelantado al martes, 6 de septiembre, las reuniones del comité ejecutivo (45 dirigentes empresariales) y de la junta directiva (220), previstas para el día 14 del mismo mes. Justamente ese día los sindicatos han convocado la manifestación contra la reforma y habrá un encuentro inicial entre técnicos de la patronal y de las centrales sindicales para preparar las negociaciones de las próximas fechas. Asimismo, la patronal de las pyme (Cepyme) reunirá a su comité ejecutivo para preparar el futuro de la CEAT, la confederación de los autónomos venida a menos en los últimos años.
Rosell transmitirá a los empresarios el alcance de la reunión que mantuvo el pasado 17 de agosto con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero -en la que también estuvieron el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, y los secretarios generales de UGT y CC OO, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo-, y la necesidad de arrimar el hombro en las reformas que se han planteado tanto de carácter económico como laboral o impositiva, entre otras, así como avanzar en la negociación bilateral con los sindicatos. Sin embargo, parece que los empresarios tienen muy poca disposición a alcanzar cualquier pacto antes de las elecciones, a la espera de un cambio de partido en el Gobierno, pese a los esfuerzos que pueda hacer Rosell por convencerles de lo contrario.
Todo está determinado, en gran parte, por aquella reunión en la que Zapatero pidió un pacto para extender la moderación salarial, cuyo fin está previsto para 2012, hasta 2014 y que se tenga en cuenta la productividad en su cálculo. Los sindicatos enviaron una carta a Zapatero al día siguiente en la que le requerían que el pacto fuera de rentas y no solo salarial. Es decir, que se tenga en cuenta los beneficios empresariales, la política fiscal y el control de precios en algunos productos. Asimismo, pidieron que, a nivel bilateral, se desbloquearan los convenios de 2011. Unos días después hubo una reunión de los secretarios de Acción Sindical (Toni Ferrer y Ramón Górriz) con los representantes de la patronal (José de la Cavada y Alberto Nadal) para sentar las bases para la negociación y para que, sin pasar mucho tiempo, los líderes se vean las caras.
Ni los sindicatos ni Rosell quieren que los tiempos políticos condicionen las negociaciones. Pero así están las cosas, que se enconaron cuando se conoció el decreto que elimina el tope de encadenamiento de contratos temporales, medida rechazada por los sindicatos. Hay cuestiones en la negociación bilateral en las que existía acercamiento antes de que se rompieran los contactos de la Negociación Colectiva, como la definición del sistema de mediación y arbitraje, la reforma de las mutuas y el absentismo. Sin embargo, parece que los sindicatos no cederán si no se desbloquean los convenios, lo que unido a la poca predisposición empresarial deja el futuro muy confuso. Si no sale así, la patronal tendrá que explicar las razones. Algunas fuentes involucradas lamentan que se encuentren "en los minutos de la basura".
Mientras tanto, Rosell tiene abierto otro frente en el mundo de los autónomos, que quiere potenciar dentro de la patronal ante el papel relevante que se espera en el sector tras el cambio de la ley que obliga a las comunidades autónomas a contar con un registro. Para ello cuenta con la CEAT, creada en tiempos de José María Cuevas, pero con un protagonismo reducido en beneficio de la ATA, organización impulsada por el Gobierno del PP que colocó a su frente a Lorenzo Amor. Rosell quiere poner como responsable de la CEAT a Pedro Barato, familiarizado con el trabajo de los autónomos por su responsabilidad en la organización agraria Asaja. No obstante, Jesús Terciado, que por cierto no estuvo presente en el encuentro con Zapatero, va a abrir el mismo martes un periodo para presentar candidaturas que hagan frente a Barato. Esto pone al descubierto posibles diferencias entre CEOE y Cepyme.
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