_
_
_
_
Prójimas anónimas
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Soñadora húmeda

Luz Sánchez-Mellado

Hoy he soñado que me lo montaba con mi jefe. Como me está jodiendo todo el santo día, lo de pasar a mayores en el inconsciente nocturno era cuestión de tiempo. Lo peor es que ha sido un polvo de campeonato, no un aquí te pillo aquí te mato. Y ahora es pasar por su pecera y ahogarme viva del sofoco que me entra. Sueños húmedos los tenemos todas, la que diga que no, miente, pero si esto no es la erótica del poder que venga Freud y lo vea. Tienes que ver al prenda. Se cree muy guapo y muy listo, está harto de oírselo a su corte de esbirros, así va él de tieso por la oficina. Lo que no sabe es que le decimos Fukushima.

No solo porque se considera atómico, que también, sino porque esa es su nota en el Test del Fin del Mundo. El filtro al que las amigas sometemos a la nómina masculina. A ver si se creen que son los únicos que nos pasan revista. Ya lo dice Elena Salgado, con lo circunspecta que aparenta: hasta las madres de la patria hablan de trapos y tíos cuando se juntan. El Parlamento estará mal, pero el curro es un erial. Y eso que tenemos el listón bajo. No le hacemos ascos ni a solteros, ni a gais ni a casados. Si no, no habría quorum. El que tiene pelo en la cabeza y se ve los pies por encima de la tripa ya nos parece algo. Ellos pensarán igual de nosotras, pero no hablamos de eso.

En el top están los de siempre. Hombres con lo que hay que tener, no me preguntes qué. Un mando intermedio, algún mindundi, un becario italiano, cierto gerifalte y un gorila del gran jefe. Ellos lo saben, claro, y te lo hacen saber pasando de ti 100 pueblos. Luego vienen los del montón: ni frío ni calor. Y después los que son duda y hay que pasar por el test de rigor. Están los Letales: con ellos, ni muertas. Los Etílicos: si acaso, hartas de vino. Y los Radiactivos: solo en caso de catástrofe nuclear. No son categorías fijas, no somos tan rígidas. Depende del contexto. Del nivel de consciencia. Y del momento del ciclo. La última Navidad, una pija de gerencia se pasó con el ron y se lio con Vandellós 2.

Bien visto, Fukushima no está tan mal. Ahí lo tienes, autista severo con su iPad. Desde que les dieron un chisme de esos a cada miembro del staff están abducidos por la novedad. Ya puedes ir desnuda que ni te miran. Digo miembros porque no hay ni una tía. La que había está de baja. Rompió el techo de cristal a cabezazos y aún no se ha repuesto. Pero mi señorito tiene su gracia, no se me va de la cabeza. Igual hasta me lanzo. Total, según Nostradamus el mundo peta en 2012 y vamos a acabar en el mismo sitio. Del amor al odio hay un paso. Y viceversa.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Luz Sánchez-Mellado
Luz Sánchez-Mellado, reportera, entrevistadora y columnista, es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y publica en EL PAÍS desde estudiante. Autora de ‘Ciudadano Cortés’ y ‘Estereotipas’ (Plaza y Janés), centra su interés en la trastienda de las tendencias sociales, culturales y políticas y el acercamiento a sus protagonistas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_