La campaña de asfaltado arranca con retraso por los actos de la JMJ
El Ayuntamiento arreglará un 85% menos de calles que el verano pasado
Los vecinos de la calle de Tornado, en Barajas, y los de la calle de Dolores Sánchez Carrascosa, en Chamartín, verán cómo los operarios enviados por el Ayuntamiento asfaltan hoy estas dos vías. En 10 calles más, de otros tantos distritos, habrá trabajos previos en el pavimento que afectarán, en mayor o menor medida, al tráfico durante algunas horas. Empieza la tradicional Operación Asfalto de Verano en la capital, solo que este año es bastante atípica. La celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) ha obligado a retrasar la renovación del firme hasta casi finales de agosto.
La campaña veraniega empezaba generalmente en julio o, como mucho, a principios de agosto, para aprovechar la menor intensidad circulatoria e interrumpir lo menos posible el tráfico. El retraso de este año obligará a trabajar también en la primera semana de septiembre.
La renovación del firme afectará a 37 calles de 21 distritos de la ciudad
El aplazamiento de las obras obligará a que se prolonguen en septiembre
Esta operación de asfaltado también es peculiar por otro motivo. El Ayuntamiento suele dividir en dos fases el arreglo de las calles de la capital: una hacia Semana Santa y otra en agosto. Y siempre destina la mayor parte del presupuesto a la campaña veraniega. El año pasado, por ejemplo, gastó en agosto dos de los 3,4 millones de euros presupuestados para este que dedicó a eliminar baches.
Sin embargo, este año ha sido justo al revés. El 80% del dinero que tenía previsto destinar al nuevo pavimento ya se lo gastó en primavera, en una campaña de Semana Santa muy larga -casi dos meses; empezó el 7 de marzo y se prolongó durante 50 días- y muy costosa. El medio millón de metros cuadrados en 107 calles o tramos que renovó el Ayuntamiento supuso un gasto de seis millones de euros. Un esfuerzo que no tiene precedentes en años anteriores. El coste de la Operación Asfalto de Primavera casi duplicó la suma de las dos emprendidas en 2010. Se renovó un 70% más de pavimento que en todo el año anterior. Superó incluso el dinero gastado en 2009, que llegó a los 5,3 millones de euros que se costearon casi en su totalidad con cargo al Plan E.
En 2007 y 2008, el Consistorio destinó 1,8 millones y 4 millones de euros, respectivamente, a renovar el firme de las calzadas madrileñas. Los trabajos de este año terminaron a finales del mes de abril, a tiempo para que en mayo, mes electoral (los comicios locales y autonómicos se celebraron el día 22 de mayo), las calles lucieran más lisas que nunca. Sin embargo, el Ayuntamiento asegura que semejante despliegue no tuvo nada que ver con la fecha de los comicios.
"Nos centramos más en la primavera por una cuestión de programación de presupuestos. Preveíamos una escalada del precio del petróleo y por eso licitamos las obras cuanto antes para conseguir mejor precio", asegura el director general de Vías y Espacios Públicos del Ayuntamiento, Pablo Usán. Como resultado, la superficie asfaltada este verano es un 85% menor que el verano pasado. Pasa de 175.000 metros cuadrados a 95.000. El presupuesto será de 1,4 millones de euros, es decir, menos de un 20% del dinero previsto para todo el año. Y las 37 calles que se van a arreglar podrán estar listas en apenas dos semanas.
En el Ayuntamiento confían en que apenas se producirán molestias a los conductores, pese a que los trabajos se extenderán hasta septiembre. Aseguran que la planificación de las obras ha minimizado "al máximo posible" las interferencias con el tráfico. Solo se cortarán las calles "en las que su anchura lo haga necesario" y únicamente durante los trabajos de extendido y compactación de la mezcla.
Las labores preparatorias, como el fresado (eliminar la capa de asfalto anterior), se realizan de día, pero el asfaltado propiamente dicho puede hacerse en muchos casos en horario nocturno, precisa Usán. Tampoco la campaña de primavera, que se prolongó casi dos meses, molestó en exceso a los automovilistas, añade. "No hubo protestas", asegura.
Las 37 calles en las que se renueva el firme en las próximas dos semanas se dividen entre los 21 distritos de la ciudad. Centro es la que tendrá más vías asfaltadas, seis, y le siguen Latina, Villaverde, Puente de Vallecas y Vicálvaro, con tres calles cada una.
El Ayuntamiento no está usando en esta campaña los nuevos materiales con los que ha experimentado en otras operaciones de pavimentación, como son asfaltos que contaminan menos o que reducen el ruido de los vehículos al circular sobre ellos.
Según el responsable del Ayuntamiento, las calles sobre las que se actuará este verano son pequeñas y con poco tráfico, lo que no hace necesario usar un asfalto especial. "Las vías principales las hicimos en primavera", señala Usán. Entonces, sobre un total de 500.000 metros cuadrados, 150.000 se pavimentaron con asfalto antirruido para mejorar la adherencia de los neumáticos a velocidades elevadas y reducir decibelios.
