Los museos se suman a la fiesta
Las principales ofertas culturales de San Sebastián se benefician de la afluencia de gente en Semana Grande
Mientras miles de jóvenes preparaban el pasado lunes en el puerto de San Sebastián sus balsas con las que protagonizar el popular Abordaje de Semana Grande, la tendera del puesto de chucherías miraba impasible el follón montado. "Mucho ruido", aclaraba mientras intentaba que su voz se escuchara por encima de la música, "pero bueno, también más negocio", reconocía. Las matemáticas ayudan estos días de fiesta a los que sin ser parte activa de ella se pueden ver beneficiados de la masiva presencia de donostiarras y turistas, entre ellos, los museos. Tres de las principales atracciones culturales han visto como el número de visitantes y curiosos se ha incrementado o por lo menos mantenido, todo un logro, teniendo en cuenta la dura competencia con el programa festivo.
El pasado martes 1.050 personas se acercaron hasta San Telmo
El Aquarium, vecino del Museo Naval y de la carpa permanente que los piratas han tenido este año en el puerto, ha programado con "un éxito enorme", según el centro, la tercera edición de la Semana de Cine y Mar. El ciclo se incluye dentro del programa de las fiestas y todos los días se han agotado las 200 entras puestas a la venta para disfrutar, entre otros, de títulos como Océanos, de Jacques Perrin y Jaques Cluzaud o The Cove, de Louis Psihoyos. Con la iniciativa el centro colabora por tercer año consecutivo de forma directa con las fiestas, y a la proyección de películas se suma el encuentro de poesía que ofrecieron ayer, entre peces, Iosu Lertxundi, Jorge Aranguren, y Maria Socorro Luis.
El Museo San Telmo sin una programación específicamente festiva, aunque ha custodiado durante estos días las figuras de los Gigantes y Cabezudos, también ha cosechado buenas cifras de asistencia. "El nueve de agosto vinieron 1.750 personas y este martes de Semana Grande, 1.050", apunta la directora del centro, Susana Soto, que subraya que el Museo en general ha conseguido atraer a un buen número de visitantes durante todo el verano "rompiendo todas las previsiones". Soto también reconoce que el mal tiempo ha supuesto un empujón y aclara que a partir del año que viene San Telmo se volcará de forma más directa con las fiestas, "nuestro objetivo es participar e involucrarnos en todos los acontecimientos que se desarrollen en la ciudad, y desde luego, la Semana Grande es uno de ellos". El fin de las fiestas además coincidirá con la clausura el próximo domingo de la primera exposición temporal, 6 mil millones de otros, programada por el centro, como recuerda Soto.
Las fiestas, sin embargo, han supuesto una tabla rasa para el Museo Naval, que ha mantenido el número de asistentes a sus instalaciones. "Estos días de fiesta viene menos gente de la ciudad", explica Socorro Romano, una de las responsables del Museo, pero el bajón en el número de donostiarras se suple con los que viene de fuera. "Sin embargo, los turistas sí que aprovechan y reservan un día para acercarse hasta aquí".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.