Cara a cara con los sorianos

"¡Buena suerte, Alfredo!". "Gracias, la voy a necesitar".

El tal Alfredo a quien iba dirigido este deseo no era otro que el candidato del PSOE a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, y quien se lo transmitía, una vecina de Soria. El aspirante socialista eligió esa localidad para poner en marcha un nuevo estilo de campaña.

En su sprint hacia La Moncloa, no tiene intención de hacer una "campaña al uso", explican en su equipo electoral. Prefiere huir del mitin tradicional y apuesta por bajarse del atril y explicar su programa a pie de calle. Su objetivo en los próximos meses, cuenta su equipo, no será llenar plazas de toros, "algo caro y fácil si se fletan autobuses", sino sustituirlas por las plazas públicas para acercar el proyecto del PSOE a los vecinos. "En los mítines se chilla y eso es lo que menos necesitamos en estos momentos", comentó.

"En los mítines se chilla, y eso es lo que menos necesitamos ahora"

El paseo de ayer por las calles sorianas en compañía de su alcalde, Carlos Martínez, y del secretario general del PSOE en Castilla y León, Oscar López, sirvió como banco de pruebas para perfilar la precampaña y abordar los siguientes actos del candidato a lo largo del verano.

La elección de Soria no es trivial. La ciudad es la única capital de provincia de Castilla y León que el PSOE ha logrado conservar tras las elecciones del 22 de mayo. Su alcalde ha revalidado su mandato con mayoría absoluta.

En su recorrido a pie por el centro, el candidato recibió muestras de cariño y apoyo, aunque comprobó que no es tan conocido como pudiera creer. Una niña se le acercó para preguntarle si era Zapatero. Él se apresuró a contestarle que ya le gustaría, "porque es nueve años más joven que yo". Aparentemente ajeno a los grupos de curiosos que se formaban a su alrededor, Rubalcaba conversó con los vecinos en el casino y tomó nota de los problemas de los comerciantes, a los que visitó en el mercado. También soportó estoicamente las críticas y reproches que le lanzaron algunos paisanos.

Además de escuchar, uno de los lemas de su campaña, también puso en práctica otro, explicar. En una rueda de prensa al aire libre en la Plaza Mayor -otra innovación-, abordó la crítica situación por la que pasa la prima de riesgo española y se mostró convencido de que el ataque de los especuladores a la deuda "será pasajero".