Osakidetza consigue contener las listas de espera sanitarias

Osakidetza mantiene sus listas de espera en los niveles previstos, aunque ha reducido su actividad en las consultas externas y las pruebas durante el segundo trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2010. En cirugía se han realizado 600 operaciones más.

La espera que más preocupa a los pacientes, la de operaciones quirúrgicas, ha bajado dos días con respecto a 2010 y ha aumentado uno comparando con el trimestre anterior. En definitiva, los pacientes vascos aguardan una media de 46,94 días. La espera se mantiene en unos niveles más o menos estables que, sin embargo, están conllevando un incremento del número de personas que han de pasar por el quirófano y también de la productividad de los profesionales, que han realizado más intervenciones. A pesar de todo, Osakidetza insiste que las operaciones urgentes se hacen en el momento.

El aumento de pacientes en lista de espera viene siendo una constante en los últimos datos. Tras el pico que registró el Servicio Vasco de Salud en el primer trimestre, con 17.880 personas en marzo, en junio esta cifra se ha reducido ligeramente, influida sobre todo por el menor número de personas que esperan en el Hospital Donostia.

Los datos son el resultado de una compleja suma de factores. Por un lado, los profesionales de Osakidetza están asumiendo muchos procedimientos que antes se derivaban a la red privada. Por otro, la tendencia al alza de la demanda no caerá en los próximos años debido al progresivo envejecimiento de la población. Además, la crisis limita el margen de maniobra que había en épocas anteriores. Todo ello llevó a Sanidad a lanzar un aviso para navegantes: no hay expectativas de que la espera baje a lo largo de 2011; el objetivo es mantener las listas en los niveles actuales.

Estos son positivos en comparación con el resto de comunidades autónomas, entre las que Euskadi sigue en el grupo de cabeza. Una decisión del Ministerio de Sanidad lo demuestra: la pasada semana, el Gobierno central aprobó un decreto por el que se obligará a que en cinco operaciones no se pueda superar un plazo de 180 días, medida que Osakidetza impulsó ya en la época de Gabriel Inclán, en 2006. El mismo decreto establece que las operaciones oncológicas se deben hacer en menos de 30 días y las cardíacas en menos de 90. De lo contrario, Osakidetza deberá derivar a los enfermos a la red privada y costear su tratamiento.

En el caso de las consultas externas, las primeras han bajado en 2.000 en el segundo trimestre con respecto al mismo periodo del año anterior. El número de pacientes en espera ha experimentado una reducción de cerca de 10.000 personas que Osakidetza explica con un error debido a las mejoras que se están realizando de los sistemas de Osabide Global y que ha dejado de contabilizar la espera de consultas externas de 4.000 pacientes del centro de salud Doctor Areilza de Bilbao. Sin embargo, el plazo es dos días inferior a 2010 y a marzo de 2011, con una media entre los hospitales de 21 días,

En el caso de las pruebas diagnósticas, se han realizado durante el segundo trimestre 5.000 menos que en los tres primeros meses del año. La comparación en este aspecto es limitada, ya que Osakidetza cuenta desde principios de 2011 con un nuevo sistema de medición de la espera de las pruebas que no permite hacer comparaciones con fechas anteriores. El número de pacientes baja de 24.331 en junio de 2010 a 10.501, una reducción muy brusca que puede estar motivada por la depuración de las mediciones que se ha realizado. La espera media es de 13,78 días, uno menos que durante el primer trimestre, aunque entonces se realizaron 5.000 pruebas más.