PSOE y PP se enzarzan en Málaga por las facturas a pagar
Utilizar la existencia de facturas pendientes de pago sin consignación presupuestaria como arma arrojadiza contra el adversario político y ponerla de ejemplo de mala gestión conlleva el riesgo de que queden en evidencia las propias contradicciones. El gobierno de la Diputación de Málaga, que preside Elías Bendodo (PP), denunció anteayer que ha heredado facturas pendientes de pago por un millón de euros que la coalición PSOE-IU gastó sin cobertura presupuestaria. Hoy, el PP en el pleno municipal de Málaga, con el voto del propio Bendodo, aprobará aprobará el pago de 468.617 euros en facturas acumuladas por el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) igualmente sin consignación presupuestaria, algunas con cuatro años de antigüedad.
El portavoz socialista, Francisco Conejo, lamentó ayer que "ahora más que nunca se evidencian las contradicciones y el doble discurso del PP, que hace en el Ayuntamiento lo mismo que critica en la Diputación", e irónicamente emplazó a los dirigentes populares a difundir en ruedas de prensa la existencia de estas facturas del IMV.
El PP finalmente no hará la auditoría externa en Diputación que anunció Bendodo en su investidura. Ayer presentó un plan de austeridad con el que pretende ahorrar 12 millones de euros en lo que queda de ejercicio, principalmente en gastos superfluos. Elimina las subvenciones después de haber dado 20.000 euros a dos cofradías para que participen en las Jornadas Mundiales de la Juventud, y reduce de 633 a 14 las personas autorizadas a realizar gastos.
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