A la orilla de la arena
Sucede que en los alrededores de Valencia la institución del chiringuito playero no ha tenido referentes de calidad, y la placentera combinación de sol, playa y gastronomía, tan ilustre en otras geografías, está representada en nuestro entorno de forma limitada.
Así parece necesario señalar algunos locales que aquí y allá se asemejan a lo pretendido. Por ejemplo, en Galli encontramos una acogedora terraza con vistas al mar y también una digna comida, quizás un tanto sólida en sus fundamentos para una época -la estival- que parece requiere de mayores ligerezas gastronómicas. Por ejemplo, las croquetas de bechamel, de hermoso tamaño y gran consistencia, que agradarán a los aficionados a ese género del frito, pero que en general empalagan. Similar aspecto se aprecia en los saquillos de pasta que contienen patatas y bacalao, una suerte de brandada a la que se le ha otorgado una tosquedad premeditada que le hace ganar en texturas.
GALLI
Avenida Marina, 187. Playa de Puçol. Valencia. Teléfono 96 211 26 53
Pese al nombre, menos contundentes que los platos anteriores resultan los pimientos rellenos de morcilla, suaves; y por supuesto los caracoles fritos, generosamente espolvoreados con sal gruesa, que adolecían levemente de falta de sabor, sin duda por la variedad empleada. Como final parece recomendable solicitar alguno de los arroces que preconizan, que en el caso del meloso con marisco pelado que tomamos gozó de ligero sabor y acertado punto de cocción.
Amable servicio en un establecimiento cuya idea pasa por servir comida en suficiencia y ajustado precio. Y en un ambiente alejado de los habituales gritos merced a su ubicación en una de las más tranquilas playas de nuestra Comunidad.
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