La JSC examina a los aspirantes

La Escuela de Verano que celebra la Joventut Socialista de Catalunya (JSC) en Lloret de Mar (Selva) examinó ayer a los cuatro candidatos que se han postulado para suceder a José Montilla en la dirección del partido. Cada uno por su lado y sin llegar a coincidir, Àngel Ros, Pere Navarro, Joan Ignasi Helena y Miquel Iceta, explicaron qué camino debía tomar el PSC, postrado en una encrucijada sin precedentes tras las severas derrotas de las autonómicas y las municipales.

Probablemente, la intervención más llamativa fue la de Àngel Ros, alcalde de Lleida, quien no anunciará hasta septiembre su condición de aspirante a primer secretario. Ros dijo que prefería "esperar cuatro años más a tener un grupo propio" en el Congreso de los Diputados que no "arriesgar a perder la unidad del PSC".

Hasta ahora, Ros había defendido con ahínco el grupo parlamentario propio y que los socialistas catalanes tuvieran voz propia en el Congreso al margen del PSOE, pero ayer aseguró que ese proceso no puede hacerse "bajo ningún concepto de forma unilateral", sino que se deberá "negociar con el PSOE". La razón, dijo, es que "el PSC es uno de los activos más importantes de Cataluña y no nos podemos permitir su retroceso".

El portavoz adjunto de CiU en el Parlament, Ramon Espadaler, salió enseguida al quite para acusar a Ros de "sumisión" del PSC y asegurar que "antepone la comodidad del PSOE a la defensa de los intereses de Cataluña", cantinela que oyen desde hace años los socialistas catalanes cuando se desmarcan en el congreso de la votación unánime del resto de partidos catalanes.

Pere Navarro, alcalde de Terrassa, y otro de los candidatos que tampoco ha anunciado oficialmente sus intenciones coincidieron con Ros en que el grupo parlamentario no era una prioridad. "Yo no sé si debemos tener grupo parlamentario propio, a mí no me molesta la idea, pero me interesa más que desde el PSC podamos impregnar más el PSOE de nuestras ideas".

El exalcalde de Vilanova i la Geltrú Joan Ignasi Helena es el único que ya ha anunciado su condición de candidato. Ayer insistió en la necesidad de profundizar en los mecanismos de democracia interna del partido y reclamó abiertamente que el candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat "sea refrendado en unas primarias en las que pueda participar todo ciudadano de progreso de Cataluña que se quiera comprometer en este proyecto político". Helena, alineado con Nou Cicle, la corriente más catalanista del PSC, pidió un giro en la dirección y afirmó que los socialistas habían dejado de hablar de ideología política y de ideas desde años.

El viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, que es el candidato mejor situado para suceder a Montilla, tampoco habló del grupo parlamentario propio, sino que pidió que se recuperara el "sentido originario del socialismo democrático". Coincidió con Helena en la necesidad de "primarias ciudadanas para escoger a los candidatos, empezando por la presidencia de la Generalitat".