La bronca de Leo

A Leo Messi le señalaron como el mejor jugador del partido que abrió la 34ª edición de la Copa América, pero con eso no le basta. Terminado el partido, recogió el trofeo con mala gana y subió al autocar con mala cara, enfadado. "Está con bronca, no le gusta perder", advirtieron desde el cuerpo técnico de la federación argentina. Y es que el empate contra Bolivia (1-1, con gol casi al final de Agüero) le supo a los argentinos a derrota, a Messi el primero. Y ya se sabe que a La Pulga nada le molesta más que perder un partido. Ni siquiera le consoló saber que la grada, siempre rácana con él, coreó su nombre por vez primera durante un encuentro con la absoluta: iban 34 minutos de partido y Leo ya había perdido la cuenta de las patadas que le habían dado los bolivianos cuando buscó un pase en profundidad que atajó el portero. Luego el zaguero Robles soltó el brazo y ahí Leo dijo basta: se buscaron con las cabezas y solo la mediación de Cambiasso, primero, y del árbitro evitaron algo peor.

El enfado posterior fue mayor. Nunca pensó Leo que el estreno en el campeonato terminara como lo hizo: "No era lo que esperábamos, teníamos que ganar, pero dentro de poco hay otro partido y no hay que volverse locos por haber empatado con Bolivia", aseguró el delantero. "Lo intentamos todo, pero hubo cosas que no salieron bien. Fue un partido raro. Hay que seguir creciendo y mejorando", añadió antes de subirse al autocar. No le queda otra que mirar adelante, a él y a su equipo. "Hay que ver las cosas que hicimos mal, pero ahora hay que ganar los partidos que restan más que nunca. Dependemos de nosotros mismos", señaló al pensar en la clasificación para los cuartos. Argentina juega el miércoles en Santa Fe contra Colombia su segundo partido en el torneo del que es anfitrión.

En esas, terció Tévez: "La gente pensaba que ganaríamos 5-0 pero esto no es fácil". El Apache admitió que Bolivia hizo un gran trabajo antes de reconocer: "Bolivia hizo un gran trabajo. Pero también es verdad que nosotros no jugamos nada bien, sobre todo porque no esperábamos que abrieran ellos el marcador", comentó el delantero del Manchester City. No se olvidó de comentar la dureza del rival: "Nos pegaron mucho, pero no podemos hacer responsable al árbitro. Estamos con confianza y hay tiempo para que podamos recuperarnos", dijo.

"No fue el debut soñado", tuvo que admitir Batista. El seleccionador argentino elogió la actitud pero criticó el juego: "Futbolísticamente hemos de mejorar porque perdimos la pelota. Es difícil jugar como el Barcelona", admitió antes de avisar de que el equipo tiene crédito. "Hay jugadores para sacar esto adelante". La hinchada está confiada y los exfutbolistas de la albiceleste, como el mismísimo Riquelme, también. El 10 de Boca dijo que está abierto a regresar a la selección en un futuro. "Ponerse la camiseta del país es muy importante. Si en algún momento me necesitan, aquí me tienen", explicó.