Una Feria excesivamente perfecta

Para muchos críticos artísticos, la excesiva perfección de las obras acaba matando la belleza. Esta máxima bien podría dedicarse a las Corridas Generales de Bilbao para el próximo agosto. Están presentes las principales figuras, los carteles son rematados, las ganaderías están contrastadas... "Una feria redonda", en palabras de los responsables de la Junta Administrativa, que ayer hicieron públicas las combinaciones. Tan redonda y tan perfecta que carece de destellos que rompan ese círculo: falta una tarde en que Bilbao paralice el mundo del toro y sea un punto y aparte en la temporada.

Los gestores del coso bilbaíno lo han sabido hacer en ediciones anteriores, cuando fijaron interesantes mano a mano, encerronas legendarias como la de El Cid o gestos en los que Ponce o El Juli se enfrentaron a victorinos en Vista Alegre. Para este 2011, nada de eso. Frustrado el retorno de José Tomás para el 3 de septiembre, el ciclo carece de un gancho firme. La empresa lo intentó con un mano a mano al que Manzanares siempre ha renunciado.

Las principales figuras, Enrique Ponce, Manzanares y El Juli estarán dos tardes, pero en los carteles deseados, sin esfuerzos destacables. Salvo el veterano valenciano, los otros dos diestros se han encartelado bajo esa competencia de protección que siempre les permite estar juntos y con las mismas ganaderías que en Las Ventas denominan del medio-toro. Si renuncian a la ganadería triunfadora del año pasado...

También acudirán dos tardes Iván Fandiño y Juan José Padilla. El vizcaíno se ha ganado ese doblete con su triunfal paso por Madrid, donde ha cortado tres orejas, y el jerezano, con el particular mérito de abrir las dos corridas duras.

Para los demás espadas, ningún brillo en el guión. Los gladiadores, a las duras, y Morante, Talavante y Perera en las tardes cerradas a las figuras en las tardes de encaste Domecq, donde solo se cuela el vallisoletano Leandro.

Una de las notas destacadas es la alternativa del malagueño Jiménez Fortes.

El autor de la imagen que lucirá el cartel de la Aste Nagusia es José María Cano, uno de los excomponentes de Mecano, que ha realizado diferentes exposiciones taurinas y el pasado año firmó el cartel de San Isidro. "He querido significar la Alhóndiga como un edificio de especial significado este año en Bilbao y el toreo de Enrique Ponce, que es uno de los consentidos del público de Bilbao", explicó Cano ayer.