Sanitas se lanza al negocio dental

No se sabe qué produce más dolor cuando se acude al dentista: la intervención o la factura posterior. Quizá por eso los españoles son de los que menos acuden a revisarse la dentadura en la Unión Europea. Sanitas, la segunda compañía del sector, quiere aprovechar esta situación y lanzará una de sus mayores apuestas: invertir 70 millones en 200 nuevas clínicas dentales a pie de calle hasta 2014. La operación supondrá la contratación de 460 personas, entre personal de plantilla y empleo indirecto.

El 60% de este mercado está ahora en manos de los dentistas privados; un 35% lo controlan las cadenas de clínicas privadas y el 15% restante es de las compañías de seguros. ¿Es una apuesta muy arriesgada? Iñaki Ereño (Melilla, 1964), consejero delegado de Sanitas, cree que es un sector en crecimiento donde Sanitas tiene baja penetración.

"Nuestra gestión en Manises reduce un 25% el gasto de la Administración"

"La facturación en este negocio está subiendo a un ritmo del 7,5% anual pese a la crisis, aunque es cierto que se viene de niveles bajos. La última cifra de facturación del sector asciende a 3.500 millones. Para nosotros, la clave será ofrecer unos servicios básicos a bajo precio a los asegurados y el resto de las intervenciones con un descuento considerable sobre los precios de la calle", apunta Ereño. Sanitas, filial de la británica Bupa, ya está buscando la ubicación en las 140 localidades donde consideran rentable instalarse.

Ereño no oculta su satisfacción con la inversión aprobada por la central de Londres. Se une a la compra de la clínica barcelonesa CIMA por 26 millones, anunciada a comienzos de esta semana. Son noticias que contrarrestan los continuos rumores de que Bupa quería deshacerse de su filial española, que ya tiene dos millones de clientes. En algunos foros se comentó que la francesa Groupama estudiaba la adquisición de Sanitas. El consejero delegado se remite a las cifras para acallar estos comentarios: "Bupa lleva invirtiendo 40 millones de media en España en los tres últimos ejercicios. Hemos cerrado 2010 con 90,7 millones de beneficio y este año esperamos ganar un 10% y superar la barrera de los 100 millones, pese a la crisis".

La mala situación de España y la dura competencia están bajando los márgenes del negocio, lo que se une al encarecimiento de los actos médicos por el mayor uso de la tecnología. El único camino para ganar más es aumentar la facturación: Sanitas está entrando en el mercado de las pymes y micropymes, además del mercado dental. Ereño insiste en que quieren comprar y que han estudiado adquisiciones, pero no han encontrado nada (aparte de CIMA), "a un precio razonable". Crecer en clientes siempre tiene el riesgo de bajar la calidad de la atención. El responsable en España asegura que vigila de cerca esa cuestión y que hay más quejas por las tarifas que por los servicios. "No hay listas de espera", afirma, aunque aclara que una demora de 15 días no se considera lista de espera.

La caída de los ingresos de la Administración ha colocado otra vez al copago sanitario y la colaboración público-privada en el debate político. Ereño no elude el asunto. "En Manises gestionamos un hospital completo que es de la Comunidad Valenciana. No hay un rótulo de Sanitas. El resultado es que la Administración ahorra un 25% de los gastos y las quejas y las listas de espera han disminuido. Está regulada la rentabilidad que podemos obtener, el 7,5%. La clave es nuestro modelo de gestión", señala. ¿A favor del copago? "En Sanitas existe esa posibilidad y la escogen muchos clientes", es su escueta respuesta porque no quiere ir más allá. "Hay sensibilidades en la opinión pública que nosotros no controlamos", dice eufemísticamente para no entrar en terrenos minados. El Hospital de Carabanchel, en Madrid, podría salir a concurso. Sanitas admite que mirará las condiciones con atención, aunque no logró hacerse con la gestión del de Móstoles, también en Madrid.

Para muchos, Sanitas será una referencia porque es el médico oficial del Real Madrid. Ereño, de familia bilbaína pero con corazón blanco, no oculta el orgullo de este acuerdo. "Los tres años que llevamos ha sido un aprendizaje que nos ha permitido sacar una nueva línea, Sanitas Sport, para deportistas aficionados. Afirma que la inversión con el Real Madrid ya es rentable, aunque lo más importante ha sido la notoriedad que le ha dado a la marca. Incluso ha habido otro beneficio no esperado: se han colocado fotos de los jugadores en las salas de espera de los dentistas y de pediatría porque han comprobado que tranquilizan a los niños. "Es otra demostración de lo que suponen los futbolistas para los chavales", comenta orgulloso Ereño.