El BBVA amplía capital en 2.000 millones de euros al adelantar la conversión de bonos

El consejo de administración del BBVA acordó ayer en México convertir en acciones la totalidad de los bonos subordinados que emitió en septiembre de 2009 y que, en principio, vencían en octubre de 2014. La operación supondrá una ampliación de capital de 2.000 millones que reforzará su solvencia. La conversión de los bonos será obligatoria para todos los inversores, que en principio ingresaron su dinero con un horizonte de inversión de cinco años. El folleto de emisión concedía al banco opciones de conversión anticipada y fue objeto de una advertencia por parte de la CNMV que incluía este punto.

El banco justifica su decisión en que los cambios regulatorios propuestos por Basilea III (la futura normativa internacional de solvencia), que aún no habían sido definidos cuando el bono fue emitido, implican que, sin la conversión, dichos bonos dejarían de computar como core capital en enero de 2013. El banco asegura que la operación no tiene impacto alguno en las pruebas de resistencia europeas en curso, en las que los expertos esperan una buena nota para el BBVA.

Francisco González augura un "cambio" político en España

La entidad señala que el diseño del bono protege los intereses de los inversores al materializarse la conversión a precios de mercado. Se tomará como precio de referencia la media de los cierres de las acciones del BBVA de las cinco sesiones del 8 al 14 de julio. El 15 de julio se calculará cuántas acciones corresponden por cada bono al dividir por el precio de conversión. "La rentabilidad por dividendo de las acciones del BBVA supera hoy el cupón del 5% del bono, por lo que la conversión no sólo protege la inversión inicial, sino que también mejora su rentabilidad", dice el banco.

El consejo también decidió dar un primer dividendo a cuenta del ejercicio 2011 de 0,10 euros. Es un aumento del 11% frente al del año anterior, pero está lejos de los 0,16 euros que pagaba hace tres años, antes de la crisis.

Durante su presencia en México, el presidente del banco, Francisco González, señaló que España está ante un cambio de "ciclo político". Reunido con los consejeros del BBVA Bancomer en la capital mexicana, el banquero dijo que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no ha tenido fe en las reformas que ha intentado y que por eso éstas no han ido por "el buen camino". El banquero dijo que ante un ambiente de tensiones e "indefinición" resulta urgente que se tomen "medidas rápidas". Reprochó al Gobierno de Zapatero por no contar con un plan de reformas y sí en cambio haber elevado la deuda del 42% al 63% en menos de tres años. Hace una semana, González dijo en Santander que el plan de reformas del Gobierno "era el adecuado. No hace falta un plan B" y que solo faltaba "tener decisión para llevarlo a cabo".

Más tarde, ante el presidente Felipe Calderón y el ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, invitado especial del consejo del BBVA, González reiteró que aunque a veces hay confusión, España "no es Grecia, ni Portugal, ni Irlanda. Tenemos fortalezas para superar la crisis. Ya se han emprendido algunas reformas, aunque queda mucho por hacer".