La disputa del voto soberanista
La celebración de estas sesiones en recuerdo a las víctimas del terrorismo no han podido evitar el escenario político en el que ha coincidido, precisamente en San Sebastián. Además, entre las propias asociaciones afectadas se ha evidenciado de que no existe la unidad necesaria. De hecho, desde el PP se oyeron ayer voces apelando que el próximo acto en el Congreso tenga la unidad que se ha acusado en la capital guipuzcoana.
Entre las víctimas del terrorismo, además, existe una cierta sensación de que se puede asistir a un cierto síndrome de Estocolmo en Euskadi en relación a la presencia de Bildu en las instituciones con respecto a olvidarse de la presencia de ETA.
Precisamente a este escenario político aludió ayer Patxi López al decir que la decisión del PNV de rechazar cualquier acuerdo global con el PSE y el PP para impedir que Bildu haya acumulado tanto poder en los Ayuntamientos forma parte de una estrategia con vista a los comicios autonómicos de 2012.
En una entrevista en la cadena COPE, indicó que resulta "evidente" que los resultados del PNV en las pasadas elecciones municipales y forales son malos si se tiene en cuenta que su presencia institucional en Guipúzcoa queda reducida a cuatro ayuntamientos (Hondarribia, Urnieta, Aia y Elgoibar). Según el líder de los socialistas vascos, los pactos que ofrecieron en consistorios y Diputaciones garantizaban "estabilidad y seguridad, lealtad institucional", además de "avance y desarrollo" de los proyectos estratégicos. Sin embargo, a su juicio, el partido presidido por Iñigo Urkullu prefirió pactar con los abertzales "para volver a etapas anteriores de acumulación de fuerzas nacionalistas seguramente no tanto por recoger nueces, sino por el temor a que el árbol y las nueces las siga recogiendo Bildu".
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