Los pactos de progreso avanzan en Orihuela, Alcoi y Ontinyent

El aplastante dominio electoral del PP en las elecciones municipales del pasado 22 de mayo ha tenido sus excepciones y en esas plazas se conforman poco a poco, en estas semanas previas a la constitución de los nuevos Ayuntamientos, acuerdos de progreso para evitar que esa hegemonía sea todavía más completa. Al pacto cerrado en Vila-real entre socialistas, Bloc, Iniciativa y Esquerra Unida, que convertirá al socialista José Benlloch en alcalde, se ha unido el de Orihuela, que permitirá obtener la alcaldía a la socialista Antonia Moreno.

En ese segundo caso el pacto, que todavía no está formalmente cerrado, es a tres bandas entre PSPV-PSOE, Centro Liberal Renovador-Claro y Los Verdes y permitirá desalojar de la alcaldía a Mónica Lorente, del PP. Antonia Moreno, que ha denunciado vigorosamente los casos de corrupción con epicentro en La Vega Baja del Segura, se haría cargo de una alcaldía de la que los socialistas han estado apartados desde que en 1986 Luis Fernando Cartagena ganó una moción de censura contra Vicente Escudero.

Bloc-Compromís quiere hacer valer su crecimiento en Alcoi y Oliva

El mapa de los acuerdos municipales entre las fuerzas de izquierda, pues, avanza poco a poco. Esta misma semana, representantes del PSPV-PSOE y del Bloc-Compromís mantendrán una reunión para hablar, sobre todo, de media docena de ciudades. Las dos más importantes son Alcoi y Ontinyent. Tanto los socialistas como el Bloc señalaron que existe un buen clima de cara a estos contactos. En la capital de l'Alcoià, el PSPV-PSOE tiene siete concejales por cinco el Bloc y dos Esquerra Unida frente a 11 del PP. En Ontinyent, son ocho socialistas, dos de Compromís y uno de Esquerra Unida frente a 10 del PP. La adjudicación en el recuento al PSPV-PSOE del octavo concejal a costa del tercero de Compromís ha causado alguna distorsión pese a que todo indica que es un error que, con toda probabilidad, subsanará la Junta Electoral Central.

El caso de Alcoi entra en un paquete que desde Compromís quieren diferenciar porque sus resultados han crecido mucho y se acercan a los del PSPV-PSOE. Es lo mismo que ocurre en Oliva, con seis concejales socialistas por cinco de Compromís. La coalición valencianista busca en esos municipios un peso mayor en los equipos de gobierno y no renuncia a aspirar incluso a la alcaldía. En sentido inverso, Compromís, con cinco concejales, necesita a los tres del PSPV-PSOE y uno de Esquerra Unida para obtener la alcaldía de Tavernes de la Valldigna, donde el PP quedó en minoría con ocho regidores.

Por otra parte, Compromís tiene prácticamente decididos los nombres de sus diputados provinciales. El concejal de Burjassot Emili Altur será su primer representante en la Diputación de Valencia, mientras que Enric Nomdedéu será el portavoz del Bloc en la Diputación de Castellón.