Seriedad rojiblanca
Que el Atlético de Madrid es un club atípico lo sabemos todos,desde sus seguidores hasta sus no simpatizantes. Que es un equipo al que quieres y que a la vez te duele, va dentro del ideario atlético, por el que sufres y disfrutas en una montaña rusa de sentimientos conflictivos. Pero que veamos cómo se rompe de golpe en su estructura y nos quedemos todos impasibles no es tan normal.
La marcha de los "grandes" actuales del equipo como son el técnico Quique Sánchez Flores, el guardameta De Gea, los delanteros Forlán y el Kun solo puede prever, a priori, una catástrofe futbolística como la de los no tan lejanos años del infierno en Segunda. Si ya no hay forma de evitar la salida de estos cracks, solo cabe esperar que el buen dinero que venga de estos traspasos sea bien aplicado. Cualquier otra política del club que no sea la de fichar con calidad y clase, a la par que potenciar la cantera, será un drama difícil de entender por la afición rojiblanca. Todos queremos un proyecto serio, sin mediocridades ni saldos, y sí con ilusión y profesionalidad.
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