Telefónica amplía el ERE a cinco años y 8.500 empleados

Telefónica y los sindicatos acercan posturas con vistas a la negociación del ajuste de plantilla. La empresa ha decidido ampliar tanto el plazo -de tres a cinco años- como el alcance del expediente de regulación de empleo (ERE) que aplicará en su filial española hasta un número máximo de 8.500 empleados, es decir, el 25% de la plantilla sobre el 20% inicialmente previsto.

A cambio la empresa acepta la demanda de los sindicatos de que se establezca una correlación entre la negociación del ERE y del nuevo convenio, y de que la duración de este último se amplíe también hasta cinco años en lugar de los tres previstos inicialmente. En esos cinco años, Telefónica se compromete a no realizar ningún ajuste adicional de plantilla, independientemente de la marcha del negocio de su filial española y de los cambios regulatorios.

Las bajas, de carácter voluntario, pasan del 20% al 25% de la plantilla

Así figura en la memoria justificativa del ERE que la dirección de Telefónica entregó ayer a los representantes sindicales, y que hoy remitirá al Ministerio de Trabajo, antes de comenzar las negociaciones con los sindicatos por el espacio de un mes.

La otra novedad sobre los planes originales de la compañía es que esta no realizará más externalizaciones de puestos de trabajo si cumple su objetivo en el ERE, que vencerá el 31 de diciembre de 2015.

Las bajas afectarán principalmente a la actividad de telefonía fija e Internet, con 8.000 sobre los 28.000 empleados que trabajan en esta área, del total de casi 35.000 que emplea Telefónica en España. En la memoria, la firma alega causas económicas para el ERE, si bien incluye otra de "fuerza mayor en sentido no estricto" debido a la especial regulación a la que está sometida como operador incumbente (con más cuota de mercado) "y que evidentemente condicionan su capacidad competitiva".

Telefónica entiende que la reducción de costes de personal es "la única vía" para asegurar la rentabilidad en "un universo de ingresos inexorablemente decrecientes" debido al avance tecnológico y la caída de precios por la fuerte competencia. El ERE estará acompañado de un plan social que prevé la creación de un máximo de 425 puestos de trabajo.

Los sindicatos mayoritarios CC OO y UGT se han mostrado receptivos con el ERE. Pero queda por ver la postura que adopta el Gobierno, que ya se opuso al mismo en su anuncio y ahora no verá con buenos ojos la ampliación.