Leyes, cajas y reformas pendientes

La fusión fría de las cajas vascas, la reforma de la ley de Cajas, la ley Municipal, la anunciada reforma de la estructura tributaria que tienen que afrontar las Diputaciones y el Gobierno y las entidades dependientes de los Ayuntamientos, como la asociación municipal Eudel, se van a ver afectadas de una u otra manera por el nuevo mapa político que sale de las elecciones de anteayer. Aunque todavía está pendiente la fase más resolutiva de los acuerdos poselectorales y de los pactos para gobernar en las diversas instituciones, la irrupción de Bildu, en general, va a acelerar algunos procesos y condicionar otros.

Si hubiera que renovar mañana con los resultados del 22-M las asambleas de las tres cajas de ahorro, la fusión fría en que se han embarcado supondría un nuevo fracaso, ya que en Guipúzcoa no saldría adelante. De los 40 consejeros que apoyan al PNV en la asamblea de la Kutxa, 13 son de Hamaikabat, fuerza que ha desaparecido del mapa. La izquierda abertzale no apoya ese proceso. Como fuerza mayoritaria en Guipuzcoa, con su representación foral y local, Bildu tendría un peso decisivo para evitar que las dos terceras partes de la asamblea votaran a favor del proceso. El calendario favorece, sin embargo a la fusión.

"No hay que perder ni un minuto en la fusión", recalcan fuentes de las cajas

El hecho de que el primer paso institucional -tras la posición pública de los tres presidentes mostrando el acuerdo para iniciar el camino hacia la acumulación de fuerzas- esté previsto para finales de junio con el sí de los consejos de administración de BBK, Kutxa y Vital, da un respiro a sus actores. Si se cumplen esas fechas para iniciar el proceso de creación de un banco que gestione sus activos, el siguiente hito se producirá en septiembre. Apenas un mes después de las vacaciones de verano llegará el momento más crítico de todo el proceso. Las asambleas generales de las tres entidades tendrán que aprobar la intregración con el apoyo de dos tercios de sus consejeros, es decir 67 del centenar que componen cada asamblea. Como ya sucedió con la fallida unión entre BBK y Kutxa, la asamblea de la caja guipuzcoana resulta la más complicada.

Pero ese calendario irá según lo marcado, si no hay imprevistos, como por ejemplo que el acuerdo laboral no se encarrile lo antes posible. Las comisiones que trabajan para estudiar el peso de cada entidad en la futura institución y los activos que se traspasan, entre otros asuntos, tienen que darse prisa para no perder el paso.

El Gobierno tiene el pie en el acelerador para modular el ritmo del segundo proceso que superpone al de la fusión: la aprobación de la nueva ley de Cajas. Cabe preguntarse si el nuevo mapa va a modificar en el Parlamento algunos de los criterios de representantividad en los órganos de decisión de las entidades financieras. Las asambleas de las cajas son muy sensibles a los cambios en los Ayuntamientos y Juntas Generales, que representan a las entidades fundadoras -las cajas municipales y provinciales-.

Si bien es cierto que los consejeros son nombrados para cuatro años, pase lo que pase con sus partidos respectivos, en abril próximo habrá que renovar la mitad de las asambleas, si antes no se han actualizado en función de los criterios de la nueva ley. Los rectores de las entidades no creen, sin embargo, que uno y otro proceso se vayan a cruzar si no hay retrasos con la fusión, "pero no hay que perder ni un minuto", aseguran fuentes de sus órganos de decisión.

Hay más incertidumbres. El presidente de Eudel, el penuevista Jon Bildarratz, alcalde de Tolosa, se ha quedado sin la makila. El domingo ganó Bildu en esa localidad. Las dudas sobre quién ocupará ahora el cargo representativo de los Ayuntamientos después de que la coalición sea el partido con mayor numero de concejales abre un periodo de incertidumbre.

El presidente de Eudel había logrado un elevado grado de intelocución con la Administración vasca en cuestiones de Interior y política fiscal. Eudel participa como oyente en las reuniones del Consejo Vasco de Finanzas y se estudiaba cómo regular su presencia para dotarla de estabilidad. Hay quien se pregunta si, en coherencia con el nuevo mapa, será un representante de Bildu quien lleve, a partir de ahora, las riendas de Eudel.