En defensa de Mariano Barbacid
Estamos muy acostumbrados, desgraciadamente, en este país a ver cómo un representante político, esté o no esté en el Gobierno, se carga a un personaje relevante de la vida cultural, científica, del mundo de la educación o de cualquier otro ámbito laboral por la simple cuestión de discrepar de opinión.
En el caso de Barbacid es una pérdida irreparable para las gentes que conforman esa nación, en este caso España. No debería poderse hacer una cosa así. Una personalidad de esas características es un patrimonio nacional, es una riqueza para todos, incluso para los que no son de la misma ideología..
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