El tortuoso camino de un divorcio
Carlos Sobera y Mar Regueras se enzarzan en una batalla dialéctica con 'La guerra de los Rose' en el Bellas Artes
Cómo pasar del amor al odio en 22 escenas. Esa es la magia del teatro, aunque sobre las tablas lo que se trate sea un tema tan doloroso como un divorcio. Mar Regueras y Carlos Sobera recorren, bajo la dirección de Garbi Losada, el tortuoso camino hacia la ruptura total de un matrimonio ejemplar en La guerra de los Rose, que estará en el teatro Bellas Artes hasta el 19 de junio.
Barbara y Jonathan se enzarzan durante toda la obra en una guerra dialéctica que busca arrancar risas en el público, pero que no deja de tratar un tema dramático. "Un divorcio, la falta de respeto hombre-mujer, la violencia de género, la muerte... son temas dramáticos, así que si los tratas desde la perspectiva del humor, estás haciendo comedia, pero comedia negra", explica Sobera.
El texto de tintes negros de Warren Adler conduce al espectador a una versión más cómica que la de la película que en su día protagonizaron Kathleen Turner y Michael Douglas. Regueras y Sobera no tienen miedo a la comparación con los actores del filme. "Nosotros somos mejores que ellos, ¿no?", bromea Regueras con Sobera, una pareja de actores que incluso entre bambalinas sigue soltándose comentarios ácidos para no perder la costumbre.
Ellos tienen sus propias anécdotas. "Carlos es un pesado, siempre se pone enfermo en el último minuto, dice que se va a quedar afónico, y luego no se queda afónico", dice Regueras, a lo que Sobera contesta que trabajar con su compañera es "una delicia".
Algo hay de Bárbara y Jonathan en los actores. "De Jonathan tengo lo que tenemos prácticamente todos los hombres, que emocionalmente hablando somos bastante negados, y nos pasa que estamos muchas veces en las antípodas de las necesidades emocionales de nuestras parejas", explica Sobera mientras abre y cierra compulsivamente la botella de agua. Regueras, con la mirada perdida en la platea, cree que coincide con Bárbara en la generosidad y el espíritu luchador del personaje. "Además, ella fue gimnasta y yo fui bailarina", concluye Regueras.
La guerra de los Rose. Teatro Bellas Artes (Calle del Marqués de Casa Riera, 2). Hasta el 19 de junio. Entradas de 16 a 25 euros.
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