Austeridad, innovación e inversión
Después de 100 días del nuevo Gobierno, queremos poner un poco de rigor en los datos que el consejero de Interior, Felip Puig, está dando con relación a la gestión del anterior Gobierno de izquierdas. La crisis afectó a los Presupuestos ya desde 2007, cuando comienzan a disminuir los ingresos. Ante esta situación, el Departamento de Interior planificó una estrategia para cumplir sus objetivos haciendo frente a la nueva situación: aumentar los ingresos y contener el gasto respondiendo a las necesidades de modernización y crecimiento.
Aumentar los ingresos: se reclama al Estado una financiación justa de los Mossos d'Esquadra, crecimiento deficitario. Se consigue pasar de 458 millones de euros recibos en 2006 a 1.084 millones en 2010. Se pasa de un déficit de 145 millones en 2006 a un superávit de 123 millones en 2010, y con 4.300 mossos más.
Se revisa la tasa por asistencia de los bomberos en siniestros, haciendo un plan piloto con la Agencia Tributaria de Cataluña y poder aplicarla en 2011, con un potencial de recaudación en las aseguradoras de más de seis millones de euros. También se revisa la contribución especial de bomberos, pagada por la patronal aseguradora para mejorar infraestructuras de emergencia, pasando de 14 a 19 millones de euros.
Se actualiza el gravamen de protección civil sobre las actividades generadoras de riesgo (química, nuclear, aeropuertos...). En 2006 se recaudaron 1,2 millones de euros y se pasa a un potencial de más de 30 millones de euros con la aportación de AENA, financiando el nuevo modelo de protección civil.
Contener el gasto, innovar e invertir: El gasto corriente aprobado (capítulo II del presupuesto) por trabajador del Departamento pasa de 11.633 euros en 2006 a 7.753 euros en 2010, el 33% menos (en el resto de Departamentos aumentó el 13%). En 2010 se ejecuta menos del 95% del presupuesto, con 70 millones de euros de ahorro (solo 24 millones provienen de la reducción salarial de junio 2010 a los funcionarios).
Eso se consigue con la implicación de todos los trabajadores y mediante herramientas como un plan de ahorro dirigido a reducir gastos de todo tipo (fotocopias, telecomunicaciones, consumos energéticos, etcétera) sin perder eficacia, o un código de buenas prácticas pionero en la Generalitat, impulsando austeridad y transparencia. A partir de 2011 se implantó la obligación de pedir tres presupuestos para compras de más de 4.000 euros y publicarlo electrónicamente.
Y con crecimiento y mejora: los bomberos han invertido en cuatro años en parques, vehículos y tecnologías más que en todas las legislaturas anteriores sumadas. En Mossos se acaba el despliegue con 30 comisarías nuevas y el complejo central de Sabadell. Se construye el centro 112 de Reus, ejemplo de sostenibilidad, con un nuevo modelo de gestión integral de las emergencias reconocido en todas partes y una Plataforma Tecnológica Integral de Seguridad y Emergencias que para los socios tecnológicos (Telefónica, Indra) es un proyecto de referencia para sus negocios globales. El nuevo Gobierno responde que es faraónico.
Y se adquiere la red de radiocomunicaciones Rescat, propiedad de Abertis, generando un ahorro anual del 60%. La red se mejora, se amplía y se extiende a policías locales y a Ayuntamientos pequeños.
En cuatro años se pilotó un proyecto líder en seguridad y emergencias, innovando e invirtiendo con austeridad, transparencia y rigor, y gracias a la inteligencia y la dedicación del personal del Departamento de Interior. Estamos orgullosos de todo ello.
Joan Boada i Masoliver. Exsecretario general del Departamento de Interior (2006-2010). Diputado. Lluís Torrens i Mèlich. Exdirector de Servicios del Departamento de Interior (2006-2010). Economista.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.