La 'Champions' en una sonrisa

Donde el Madrid volvió a usar el músculo con las mandíbulas apretadas, el Barcelona relajó el gesto, hasta convertir el cuarto partido del año contra el Real Madrid, con la Copa de Europa en juego, en algo divertido. El Barcelona abrió y cerró el partido desde la natural felicidad de un equipo que disfruta con lo que hace, a gusto con la propuesta del entrenador, con los jugadores dispuestos a ser los mejores de una manera muy determinada.

Jugó el Barcelona para ganar y ganó sin Iniesta, según subrayó Xavi camino de vuelta a casa. "Pero con Messi, eso sí", insistió el volante, rendido al talento del argentino que en el Bernabéu marcó un gol para la historia en un partido que llegó precedido de una tensa previa. "Habla solo de fútbol, Pep, no caigas en su trampa", le aconsejaron al técnico antes de la rueda de prensa en el Bernabéu. Pero Guardiola entendió que el equipo necesitaba que se abriera la camisa y no hizo caso: salió a escena para hacer lo que le pedía el cuerpo. Lejos de sentirse incómodo, el técnico confesó a sus íntimos habérselo pasado bien en el papel de Mou. La verdad es que el beneficioso efecto que le generó al equipo fue tan brutal que Pep fue el primer sorprendido. Recibido en el hotel con aplausos de complicidad y agradecimiento por el equipo, lo mejor estaba por llegar. Después de la cena, Víctor Valdés sirvió su particular postre al grupo, un vídeo grabado con técnicas de lo más caseras el pasado lunes en la ciudad deportiva, donde el portero tiró de su repertorio en la imitación -de Fernando Alonso al presentador del NoDo- y con la ayuda de Pep Costa, uno de los asistentes del equipo, que interpreta varios "papeles".

La colaboración técnica en el staff de Guardiola, que le brindó soporte técnico, terminó de completar un documento inolvidable: "Alguno lloraba de risa", reconocen testigos. A un equipo que se ríe tanto en el camerino no se le puede pedir otra cosa que que disfrute jugando al fútbol. Y eso hizo Guardiola, en una vuelta de tuerca a la célebre frase de Cruyff, el "salir y disfrutar" que el flaco pronunció en Londres en 1992 antes de la final de la Copa de Europa contra la Sampdoria. Guardiola insistió mucho en la importancia de ser valientes, de ir a por el Madrid desde el principio. "Solo me ha dicho que encare a Ramos. Que cada vez que pueda, me vaya a por él", reconoció después del partido Sergi Roberto, el juvenil que debutó en el Bernabéu. "Toqué la pelota tres veces, pero con esto me basta", dijo. Su presencia fue un guiño a una manera de entender la idea de club.

"Nos pidió que fuéramos muy inteligentes, que no cayéramos en sus provocaciones y fuéramos valientes", reconoció otro de los futbolistas. La idea era ser más fieles que nunca al estilo, con Pedro y Villa ensanchando el campo para facilitar el juego interior y el uno contra uno en banda. Guardiola ató a los laterales para evitar contras. De darle carácter se encargaron Puyol y Mascherano.

"Es increíble lo que transmite Puyi", reconocían en el viaje de vuelta técnicos y compañeros, que se repartían abrazos con la sonrisa en la cara. En el vuelo la afición coreó como ninguno el nombre de Afellay, que protagonizó una de las jugadas del partido. Bojan, Abidal, Maxwell, Seirul.lo y los fisios que no viajaron a Madrid, siguieron juntos el partido mientras cenaban en un restaurante del Port Vell, en la Barceloneta.