Alarte propone una ley para evitar sobrecostes en las obras públicas

"Diremos adiós a la época de las obras faraónicas, que solo dan satisfacción al político que las inaugura y que generan una pesada hipoteca para todos", dijo ayer Jorge Alarte en una intervención en Madrid ante el Foro Nueva Economía. El de las inversiones públicas fue el ámbito en el que el líder socialista y candidato a presidente de la Generalitat, anunció las principales novedades de su ya conocido programa de saneamiento y reforma de la economía valenciana. Por una parte, se comprometió a que "cada inversión pública vendrá acompañada de un análisis coste-beneficio que se publicará en la Red y estará a disposición de todos los valencianos" y, por otra parte, anunció una "ley de eficiencia que posibilitará un estricto control para eliminar los sobrecostes de todas las inversiones, sin reducir su funcionalidad, calidad y seguridad".

El candidato quiere reducir a la media la deuda del Consell en cuatro años

"Diremos adiós a la época de las obras faraónicas", asegura el líder socialista

"No hay ningún mérito en gastar dinero público", aseguró Alarte, que insistió en su intervención en un control estricto del gasto público y puso plazo también al compromiso de situar la Comunidad Valenciana "en un ratio de endeudamiento inferior a la media de las comunidades autónomas españolas". El candidato socialista recordó que actualmente la deuda de la Generalitat Valenciana es la más alta de España en relación al producto interior bruto y dijo que su objetivo de reducción debe cumplirse en cuatro años.

Alarte, que fue presentado por el vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien dijo que sabe "muy bien" quién es el candidato socialista y lo contrapuso a la desmemoria de Mariano Rajoy sobre Ricardo Costa cuando le preguntaron por la presencia de imputados por corrupción en las listas del PP. Rubalcaba consideró "conveniente y razonable" que los valencianos "permitan a Jorge Alarte salirse con la suya el 22 de mayo". Por su parte, el líder de los socialistas valencianos evitó entrar en el debate sobre las primarias del PSOE para suceder a Rodríguez Zapatero y añadió que no está en ese proceso sino en el de la sustitución del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, según informa Efe.

"No queremos resignarnos a que la Comunidad Valenciana sea solo crónica judicial", advirtió Alarte al inicio de su intervención, centrada en la política económica, "La corrupción está afectando seriamente a nuestra reputación, a nuestra credibilidad, al funcionamiento normal de nuestras instituciones y sin ninguna duda a nuestra economía. Está afectando a la vida de los valencianos".

En un acto en el que, además de Rubalcaba, asistieron la dirigente del PSOE Elena Valenciano, los ministros José Blanco y Leire Pajín y el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, el candidato socialista a la presidencia de la Generalitat dijo que, si llega al Consell, pondrá "el contador a cero en todas las facturas" y reducirá el tiempo de pago a proveedores a un máximo de 60 días ("No les mentiré", advirtió; "ya hay demasiadas mentiras y demasiados plazos no cumplidos"). El objetivo de Alarte con el saneamiento de la Generalitat, en la que propone suprimir 100 de las 130 empresas públicas y fundaciones, es liberar 3.573 millones de euros para objetivos como luchar contra el paro, -muy especialmente el que afecta a "uno de cada dos jóvenes valencianos"-, la inversión en formación y en sanidad y servicios sociales, con especial referencia a las ayudas a la dependencia.

El líder socialista planteó la necesidad de un "nuevo modelo productivo". Según Alarte, la Comunidad Valenciana "ha estado en el centro de la diana del viejo modelo económico especulativo", que hay que superar. "El sector de la construcción no es bueno, ni malo, es simplemente necesario", dijo. "Lo malo es que se enfoque a la especulación y el enriquecimiento fácil. Lo malo es el exceso, la desproporción y la desmesura". "Sustituyamos el concepto de prosperidad basada en la deuda, construir y consumir sin más por sostenibilidad y competitividad", concluyó.