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Reportaje:

A merced del mar

Países punteros debaten en el BEC el futuro de la energía marina - Las empresas vascas pueden aprovechar este nuevo mercado

El País Vasco explora sus opciones en el sector de las energías renovables marinas. Se trata de una fuente de suministro limpia y ecológica que puede encontrar en Euskadi un amplio campo de desarrollo. De momento, la iniciativa pública ha impulsado dos proyectos pioneros en Arminza y Mutriku para aprovechar la energía de las olas. Para entender mejor cuál puede ser el hueco concreto en el que potenciar sus recursos, el Clúster de Energía del País Vasco participó ayer en un encuentro celebrado en el marco de la feria Sinaval, celebrada en el BEC, titulado Estrategias de país en lo referente a la energía sostenible marina, la industria offshore y la actividad naval. A la reunión acudieron responsables institucionales de países punteros en obtener la energía del mar, como Noruega, Reino Unido y Dinamarca.

Noruega, Dinamarca y Reino Unido exploran proyectos pilotos
La profundidad de las aguas vascas dificulta la tecnología 'offshore'

Así, Noruega, por ejemplo, cubre el 60% de sus necesidades de consumo energético con energías renovables, frente al 8,5% de la Unión Europea. El país nórdico quiere llegar el 73% en 2020 -Europa aspira al 20%-. Noruega dispone de 2.600 kilómetros de costa y un gran potencial para la eólica offshore -mar adentro-, con un potencial estimado de unos 66 Teravatios/hora -un teravatio equivale a un billón de vatios-, pero aún estos proyectos aún no son una realidad. Este país inaugurará en 2012 una planta piloto para aprovechar la fuerza del viento en Canarias y en la costa cantábrica. También hay trabajos sobre ósmosis, "un proceso que obtiene energía al mezclar agua dulce y salada", explicó Hakon Hauan, el director de la oficina comercial noruega Innovation Norway, ubicada en Madrid.

Dinamarca, por su parte, es un ejemplo de cambio de modelo productivo. De gran tradición naval -llegó a fabricar el 3% de la flota mundial-, los astilleros del país han desaparecido prácticamente. En ese mismo periodo, la industria eólica pasó a constituir una de las primeras del país -el 50% de los aerogeneradores del mundo son daneses-, señaló el consejero comercial de la embajada de Dinamarca en Madrid, Jakob Hanghoj. La eólica offshore es la gran apuesta de las autoridades danesas, pero de momento tiene 600 MW de potencia instalada, que prevé duplicar en 2012 hasta alcanzar el 12% de su producción energética. Reino Unido, por su parte, aspira a ser el "líder mundial" en esta energía, según el cónsul británico en Bilbao, Derek Doyle. En la actualidad los emplazamientos marinos están en concurso público. En 2020 la offshore generará 100.000 millones de libras.

Las aguas en Euskadi, a diferencia de los países nórdicos, son muy profundas y eso obliga a indagar en las instalaciones flotantes, tal y como recordó José Ignacio Hormaeche, director general del Ente Vasco de la Energía. Así las cosas, además de aprovechar la energía de las olas, una opción más factible en Euskadi, la comunidad autónoma tiene la oportunidad de, por ejemplo, construir los barcos necesarios en los países del Norte para desarrollar sus tecnologías. "Lo esencial en este momento es que nuestras empresas estén presentes en todos esos planes que se han puesto en marcha. La eólica offshore llegará aquí con mucho retraso. Ahora no podemos aspirar a emular esos ambiciosos proyectos", indicó Hormaeche.

De izquierda a derecha, el comercial noruego Hakon Hauan, el consejero de la embajada danesa, Jakob Hanghoj, el cónsul británico Derek Doyle, el presidente del Foro Marítimo Vasco, Luis Cañada y el director general del EVE, José Ignacio Hormaeche.
De izquierda a derecha, el comercial noruego Hakon Hauan, el consejero de la embajada danesa, Jakob Hanghoj, el cónsul británico Derek Doyle, el presidente del Foro Marítimo Vasco, Luis Cañada y el director general del EVE, José Ignacio Hormaeche.SANTOS CIRILO

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