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Reportaje:LIGA DE CAMPEONES | Vuelta de los cuartos de final

El éxito depende ahora del deseo

El Barça aspira a que su reto con el Madrid motive a un equipo que ha dado estabilidad al club

Ramon Besa

El Barcelona disputará las semifinales de la Liga de Campeones por cuarta vez consecutiva (Manchester United, Chelsea, Inter y Madrid), quinta en seis ediciones, un éxito para un club que ha dado un salto cualitativo extraordinario en los últimos 20 años. "Imagínate qué significa", subraya el director deportivo, Andoni Zubizarreta, "si Wayne Rooney asegura que está especialmente satisfecho porque el Manchester United ha disputado cuatro de las últimas semifinales de la Champions".

La estabilidad deportiva de la entidad azulgrana ha permitido que un cambio radical en la presidencia, de Joan Laporta a Sandro Rosell, no haya sido traumático, circunstancia muy a tener en cuenta en una institución pasional y volcánica. El hilo conductor es el entrenador, Pep Guardiola, y el programa futbolístico está inspirado en una ideología inequívoca, nacida a partir de Johan Cruyff y desarrollada con directivos deportivos como Txiki Begiristain y Andoni Zubizarreta.

Zubizarreta: "Ante los partidos que aguardan, debemos crear un entorno respetuoso"
Los azulgrana coinciden en que la plantilla de Mourinho es la más fuerte de Europa

El equipo de Guardiola ha ganado ocho de los 10 títulos en disputa desde su llegada en 2008 y ahora compite por los tres propios de una temporada: semifinalista continental, el día 20 jugará la final de la Copa y afronta los últimos siete partidos de Liga con una ventaja de ocho puntos. Tres competiciones distintas y un mismo adversario: el Madrid. "Llevamos 10 meses aguantando", interviene el técnico azulgrana. "Prefiero jugar contra ellos a no hacerlo, son más pesados cuando jugamos".

El Madrid necesita batirse con el Barça para que su juego obtenga el certificado de garantía y a los azulgrana no les queda más remedio que medirse a los blancos y saber dónde están, palabra de Zubizarreta. "Habrá que saber gestionar igual de bien la celebración como la decepción. La serie de partidos que nos aguarda debería ser el mejor anuncio para el fútbol del país. Hay que ser respetuosos con el fútbol, mantener un respeto cívico. Nuestra obligación es crear un entorno respetuoso".

Los azulgrana apelan al respeto en cada intervención, sobre todo con vistas a la final de Copa, cita que reunirá a más de 20.000 aficionados de cada equipo en Mestalla. El encuentro, en cualquier caso, puede quedar condicionado por las secuelas del clásico del Bernabéu. "Dependerá del qué y del cómo ocurra el sábado", agrega Zubizarreta. "Nosotros llevamos demasiado tiempo compitiendo en la Liga como para ahora no prestarle la atención merecida. Vamos a poner el fútbol y el alma en la serie".

Hay coincidencia en el Barcelona en que el Madrid dispone de la plantilla más fuerte de cuantas compiten en Europa. También se subraya que el equipo de Mourinho puede llegar a jugar de tres y cuatro maneras distintas en un mismo partido, nada que ver con el Barça, entregado a un estilo tan particular como brillante, sin picos, reincidente. Una forma de entender el juego de nuevo apreciable el martes en Donetsk. No hay por tanto inquietudes en el bando barcelonista antes de viajar a Madrid.

Entiende Zubizarreta que el posible cansancio físico por contar con un plantel más corto que el madridista se combatiría con la motivación y también con la capacidad de varios futbolistas para ser solventes en distintas posiciones, cosa que confirmaría la buena política de fichajes del club. Adriano ha jugado en los dos laterales; Mascherano puede ejercer de volante o de central; Afellay ha oxigenado el ataque, y Villa le da profundidad, remate y gol al equipo.

"Mascherano tiene velocidad, le da buena salida a la pelota y tácticamente es inteligente", opina Guardiola, especialmente satisfecho por el partido del Jefecito como zaguero central, el noveno de la temporada, en el Donbass Arena contra el Shakhtar. "Nos tranquiliza constatar la capacidad de adaptación que tienen nuestros jugadores para ocupar varios puestos y mantener un buen rendimiento", remata Zubizarreta. La gestión de la alineación continúa siendo el nudo del asunto desde el lado del Barcelona.

Reaparecido Messi, a Guardiola le toca decidir ahora en cada partido la mejor opción para jugar de central y de pivote, regular la participación de los delanteros y afrontar incluso debates como el que se generará sobre la portería en la final de Copa. Asuntos con los que ya está acostumbrado a discutir. Hay, sin embargo, una prioridad general: estimular el deseo de la plantilla, conseguir que su competitividad se traduzca también en pegada, marcar más goles.

Los resultados, en cualquier caso, le avalan frente a los tanteos cortos: desde la derrota en el Emirates contra el Arsenal (2-1), el Barcelona ha encadenado 10 victorias por un solo empate, el del Sánchez Pizjuán ante el Sevilla. Regular, el Barça va servido para la serie del clásico.

Piqué celebra con Messi el gol del argentino al Shakhtar.
Piqué celebra con Messi el gol del argentino al Shakhtar.SERGEI SUPINSKY (AFP)

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Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.
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